Mal País, el paraíso costarricense de Gisele Bündchen

Aquí da largas caminatas por sus interminables playas de arena blanca, surfea en sus cálidas aguas, contempla impresionantes puestas de sol sobre el océano y monta a caballo a orillas del mar o por su selvática naturaleza. Te descubrimos el lugar donde a la cotizada supermodelo brasileña le gusta perderse en sus vacaciones.

por hola.com

Dicen que las playas de Mal País y Santa Teresa están entre las más bellas del mundo y eso es solo un apunte de la riqueza que atesora este pequeño rincón de Costa Rica situado en el extremo sur de la península de Nicoya que tiene enamorados a aventureros y surfistas de todo el mundo y también a numerosas celebridades de Hollywood, que han encontrado en él su pequeño paraíso, lanzándose a comprar propiedades o construir casas de ensueño. La modelo y actriz Gisele Bündchen es una de ellas, quien aprovecha cualquier parón en su trabajo para escaparse junto a su familia a descansar en esta esquinita del país centroamericano.

En comparación con Santa Teresa, más desarrollada, Mal País todavía conserva algo de aquella aldea de pescadores y ganaderos que fue en otro tiempo, y eso que en su entorno se han instalado en los últimos años algunos lujosos hoteles, aunque integrados en el entorno. En buena parte se debe a que su acceso se realiza por una carretera de tierra desde Cobano que se hace complicada en temporada de lluvias y también que aquí la vida transcurre a otro ritmo. La mayoría de sus habitantes utilizan motocicletas y cuadriciclos para desplazarse y los que llegan hasta este lugar lo hacen buscando una inmersión en la exuberente naturaleza de Costa Rica.

Mal País tiene poco que ver con su nombre, muy al contrario, sus seis kilómetros de costa, que se extienden entre playa Carmen y la Reserva Natural Cabo Blanco, son de una belleza escénica y natural única, donde se combina un litoral rocoso muy irregular con playas de arena suave y aguas cristalinas perfectas para bucear y también para montar a caballo, dar largas caminatas –por Punta Barrigona o Punta Cuevas-, practicar todo tipo de deportes acuáticos, observar aves o contemplar el bello paisaje marítimo circundante al atardecer. Siguiendo la línea costera hacia al norte y a solo un paso se encuentran las famosas playas de Santa Teresa, todo un reclamo para surfistas.

Hay que reservar un día entero para dedicarlo a recorrer la contigua Reserva Natural de Cabo Blanco, en el mismo extremo de la península, la primera área protegida de Costa Rica. Se puede acceder a través de la misma punta, aunque será mejor llegar desde Monztezuma, a unos 10 kilómetros, para entrar en el parque por la entrada principal. De las 3.000 hectáreas protegidas, entre terrestres y marinas, que suma se cuentan bosques primarios y secundarios, alrededor de 140 especies de árboles, un buen número de mamíferos y aves marinas y playas inalteradas, como la de Balsitas. Al frente y a menos de dos kilómetros de la costa, se halla la Isla de Cabo Blanco, un peñón rocoso que pone el límite geográfico a este recorrido por esta península de Costa Rica que ya han descubierto un puñado de famosos. Eso es una buena pista que habría que seguir con lupa.

GUÍA PRÁCTICA

CÓMO LLEGAR
Hay dos formas de llegar a Mal País. La primera es tomar un ferry desde Puntarenas a Paquera, que queda a una hora del destino, donde llegar en coche de alquier o en autobús. La otra opción es tomar un vuelo doméstico desde el aeropuerto de San José o el vecino de Pavas hasta el de Tambor, de ahí se llega en taxi hasta Mal País.

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