Los nuevos títulos de la reina Beatriz y los Príncipes de Orange y el nuevo orden de sucesión al trono de Holanda
La princesa Amalia, hija mayor de los futuros Reyes, ocupará el primer lugar en la línea sucesoria tras la coronación, seguida por sus hermanas, la princesa Alexia y la princesa Ariane
Una nueva era comienza en la Casa Real holandesa tras la abdicación de la reina Beatriz. Afectará a los principales implicados, pero también al resto. Del primero al último miembro de la Familia Real de Holanda. Así los Príncipes de Orange pasarán a ser rey Guillermo Alejandro y reina Máxima, mientras que la reina Beatriz reemplazará su título por el de princesa Beatriz. La familia de los futuros Reyes permanecerá en su actual residencia de Eikenhorst en Wassenaar después de la toma de posesión. A su debido tiempo se mudarán al palacio de Huis ten Bosch de La Haya, que mientras tanto será utilizado para recepciones y reuniones oficiales. Posteriormente, la Reina, en ese momento princesa Beatriz de Holanda, se trasladará a su residencia en el Castillo de Drakensteyn en Lage Vuursche. El palacio Noordeinde seguirá en uso como palacio de trabajo.
También cambia el orden sucesorio al trono de los Países Bajos con la próxima coronación de Guillemo IV de Holanda. La princesa Amalia, hija mayor de los futuros Reyes, ocupará la primera posición en la línea sucesoria desde el próximo 30 de abril. En el hipotético caso de que el futuro Rey falleciera antes de la mayoría edad de la nueva Princesa de Orange, se nombraría un regente hasta que ésta cumpliera los 18 años. Las hermanas de la nueva Heredera, la princesa Alexia y la princesa Ariane, la siguen en el segundo y tercer puesto. El cuarto lugar corresponde al príncipe Constantino, hermano menor del futuro monarca, y los tres siguientes (quinto, sexto y séptimo) a sus hijos: la condesa Eloisa, el conde Claus Casimiro y la condesa Leonor. En la lista no aparecen ni el príncipe Friso ni sus hijas, ya que el hijo mediano de la Reina no solicitó en su momento permiso al Parlamento holandés para contraer matrimonio con su esposa, la princesa Mabel. El octavo y último lugar de la línea sucesoria holandesa será para la princesa Margarita, hermana de la reina Beatriz. A partir de ahora, los hijos de la princesa Margarita pierden todos sus derechos sucesorios al trono.
La vida del príncipe Constantino y de su esposa, la princesa Laurentien, también sufrirá con la coronación cambios significativos al convertirse en el apoyo institucional de los nuevos soberanos. Sin embargo, esta nueva responsabilidad no llega por sorpresa. Ya en 2002, con motivo de la boda del Heredero, los príncipes Constatino y Laurentien se mostraron dispuestos a ayudar a los Príncipes de Orange en sus funciones, una vez estos ascendieran al trono. Su nueva función será comparable a la que hasta ahora han desempeñado la princesa Margarita y su esposo, Pieter van Vollenhoven, cuya actividad oficial cesará con el fin del reinado de Beatriz de Holanda. Los detalles de la nueva tarea de los príncipes Constantino y Laurentien están aún por determinar. A diferencia de la princesa Margarita y su familia, el hermano pequeño del futuro rey no vive en Holanda sino en Bruselas, donde trabaja para la Unión Europea. Las responsabilidades de su nuevo papel dentro de la Casa Real obligarán con toda seguridad a que los príncipes Constantino y Laurentien tengan que instalarse en los Países Bajos de nuevo. Hasta el momento el príncipe Constantino y la princesa Laurentien, pese a formar parte de la Casa Real, no reciben ninguna asignación de las arcas públicas, un hecho que todo apunta cambiará igualmente una vez el nuevo Rey haya accedido al trono.