Madonna Louise Veronica Ciccone Ritchie comenzó su formación artística como bailarina en Nueva York, aunque pronto demostró sus dotes como cantante. Su estilo se convirtió en tendencia, coronándose como la sucesora moderna de Marilyn Monroe: faldas sobre pantalones, colgantes con símbolos religiosos y su pelo rubio platino.
Like a virgin, Material girl y La isla bonita la catapultaron a lo más alto de las listas estadounidenses, causando un gran escándalo por su provocativa visión religiosa.
En 1985, se casó con el actor Sean Penn, aunque el amor les duró sólo tres años. Junto a Guy Ritchie ha encontrado la estabilidad para criar a sus tres hijos: Lourdes María, fruto de su relación con el cubano Carlos León, Rocco, nacido de su matrimonio con Ritchie, y David, adoptado en un orfanato de Malawi.
Madonna ha potenciado una imagen escandalosa, alimentada por la publicación de un libro de fotografías de temática sexual, Sex, documentales, En la cama con Madonna, y coreografías transgresoras –en la ceremonia de los premios MTV en 2003 besó a Britney Spears y Christina Aguilera y en su Confessions Tour aparecía en escena “clavada” en una enorme cruz.
Su incursión en el cine tuvo éxitos, Buscando a Susan desesperadamente recaudó casi 17 millones de euros, y fracasos, Who’s that girl. Obtuvo un Globo de Oro por su papel en Evita y actualmente dirige su propia cinta, Filth And Wisdom.
En 2006, H&M contó con sus diseños para lanzar una línea de ropa que ella misma promocionaba en sus conciertos de Confessions Tour con los que recuperó la música dance de los años setenta.
En los noventa, se unió a la Cábala, una doctrina que sigue la interpretación mística y esotérica que los judíos daban a los textos bíblicos.
