La emotiva despedida a un hombre generoso, valiente y ejemplar
Durante los últimos años de su vida, Adolfo Suárez no se acordaba de que había sido el hombre que cambió nuestra historia, el hombre que fue el guía de la Transición española, el hombre de personalidad arrolladora, marido y padre ejemplar. Sin embargo, el resto de los españoles sí que nos acordamos de todos sus logros y valientes hazañas, y es por ello que, de nuevo, la emoción y la solemnidad han sido los protagonistas del funeral de Estado que se ha celebrado este lunes en la catedral de la Almudena.
Los Reyes y los Príncipes de Asturias entraban en el templo acompañados de Rouco Varela, que aprovechó para charlar unos minutos con el monarca antes de que diera comienzo la celebración religiosa, que ha sido prácticamente igual a la que se celebró por el expresidente Leopoldo Calvo Sotelo. Don Juan Carlos y don Felipe lucieron insignias de la Orden del Toisón de Oro, condecoración que le fue entregada al marqués de Suárez a título póstumo.
Los hijos y nietos de Suárez se mostraron muy unidos en todo momento. Llegaron juntos a la explanada de la catedral y ocuparon la nave central del templo, junto a otros familiares y amigos de la familia. Entre ellos, los médicos que atendieron al exdirigente en la Clínica Cemtro de Madrid, donde permaneció hospitalizado una semana antes de su fallecimiento, el pasado domingo, o Fermín Urbiola, que actuó de portavoz de la familia y fue quien comunicó su muerte.
Tras sonar el himno nacional, el nieto de Adolfo Suárez, que también se llama como él, protagonizó uno de los momentos más emotivos de la misa. Dio lectura a la segunda carta del apóstol Santiago a los Corintios. “No nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve. Lo que se ve es transitorio, pero lo que no se ve es eterno”, ha dicho emocionado ante la atenta mirada de todos.
En su homilía, Rouco Varela ha recordado la "larga, limpia y generosa trayectoria" del expresidente, asegurando que si la concordia fue posible con él, "¿por qué no ha de serlo también ahora y siempre en la vida de los españoles, de sus familias y de sus comunidades históricas? Buscó y practicó tenaz y generosamente la reconciliación en los ámbitos más delicados de la vida política y social de aquella España que, con sus jóvenes, quería superar para siempre la guerra civil: los hechos y las actitudes que la causaron y que la pueden causar".
"Sirvió a los españoles con rectitud y fortaleza ejemplares en uno de los momentos más cruciales y delicados de su historia contemporánea. Es la nobleza de corazón de tantos creyentes y de tanta gente sencilla y de buena voluntad que se expresó espontáneamente desfilando en largas e interminables colas para rendirle un último homenaje de reconocimiento a su persona y que se manifiesta, sobre todo ahora, en la oración por él y, ¿cómo no?, también por España", afirmó el arzobispo, que también quiso recordar la "heroica" actitud que mostró ante la enfermedad de su esposa y su hija. Suárez vivió uno de los momentos más duros de su vida en el año 2001, cuando falleció Amparo, su compañera de vida, y tres años después su hija Mariam falleció también de cáncer. "La forma sobrenatural de su aceptación y de su vivencia del sufrimiento en la difícil y heroica temporada de la enfermedad de su hija y de su amada esposa y en los años crueles de la propia, que el asumió enteramente, hablan de un hombre de una arraigada y profunda fe cristiana".
El himno español volvió a sonar en la Catedral de la Almudena, que ha acogido aproximadamente a unas 1.100 personas, que mostraron su tristeza al dar el último adiós a Suárez. Durante la misa, hemos visto a los tres expresidentes del Gobierno, Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, compartiendo banco.
"Podéis ir en paz". El funeral de Estado por Adolfo Suárez llegó a su fin hacia las 20.00 horas y concluyó con el afectuoso saludo de los Reyes y los Príncipes de Asturias a la familia del expresidente, a la que una vez más mostraron su más sentido pésame en estos difíciles momentos. El monarca, viejo y gran amigo de Suárez, dedicó palabras de ánimo a sus hijos, que vivieron con emoción la misa, y también cariñosos gestos sobre todo a los más jóvenes, los nietos del expresidente. Tras ellos, las numerosas autoridades que han acudido al solemne homenaje mostraron sus condolencias a los familiares y, después, fueron abandonando poco a poco el templo madrileño.
Máximas autoridades y líderes internacionales
Numerosas autoridades han acudido al funeral de Estado por Adolfo Suárez: todos los miembros del gabinete de Mariano Rajoy, a excepción del titular de Economía, Luis de Guindos, que se encuentra en Atenas para participar en el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros (Ecofin); además de los 17 presidentes autonómicos y los de Ceuta y Melilla, algunos de los cuales habían visitado ya la capilla ardiente de Suárez instalada en el Congreso, como el de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, que ha coincidido por primera vez en varios meses con Rajoy, a quien no ha visto desde que anunció la convocatoria de una consulta soberanista; y los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero.
En la ceremonia fúnebre han estado presentes también los presidentes del Congreso, Senado, Tribunal Constitucional, Poder Judicial, Consejo de Estado, Tribunal de Cuentas y Consejo Económico y Social, así como la Defensora del Pueblo y el Fiscal General del Estado, así como el líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, portavoces parlamentarios, el presidente de la CEOE, ex ministros de los Gobiernos de Suárez y los "padres" de la Constitución Miquel Roca, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y José Pedro Pérez Llorca. Entre las autoridades madrileñas, además del presidente autonómico, Ignacio González, estarán la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes.
Al funeral celebrado en la Almudena también han asistido más de una quincena de mandatarios internacionales. Entre los representantes extranjeros que han confirmado su asistencia destacan un jefe de Estado, el ecuatoguineano Teodoro Obiang, acompañado de su esposa Constancia Mangue, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, así como el primer ministro marroquí, Abdelilah Benkirán; los viceprimeros ministros del Reino Unido, Nick Clegg, que ha acudido acompañado de su mujer, Miriam González, y de Portugal, Paulo Portas, y el vicepresidente argentino, Amado Boudou. También acudirán el primer ministro de Armenia, Tigran Sarsián, y el viceprimer ministro de Bulgaria, Tsvetlin Youchev, mientras que la delegación de Estados Unidos estará encabezada por el secretario de Marina, Ray Mabus.
Ya descansa junto a su mujer, Amparo Illana
Los restos mortales de Adolfo Suárez fueron enterrados el pasado martes en el claustro de la catedral de Ávila, en una tumba con el epitafio "La concordia fue posible", tras un funeral de "corpore insepulto" oficiado por el obispo de esa diócesis, Jesús García Burillo. El féretro llegó a Ávila después de que ser despedido con honores de Estado en el Congreso de los Diputados donde permaneció abierta desde el lunes por la mañana una capilla ardiente en la que los Reyes, los Príncipes y la infanta Elena rindieron tributo al expresidente del Gobierno y consolaron a su familia y donde el Monarca impuso a Suárez a título póstumo el Collar y Distinguida Orden de Carlos III.