Aunque no aparezcan escritas en ningún sitio, en el gimnasio, como en cualquier sitio en el que compartas un espacio con otras personas, existen unas normas de obligado cumplimiento, que garantizan el buen ambiente entre todas las personas que pasan por allí. Como nadie te las suele decir, es posible que no cumplas alguna si eres nueva en el gimnasio.