Educar a nuestros animales de compañía requiere conocimiento y paciencia. De lo contrario, podemos perjudicar su bienestar y su salud y generarles miedos y fobias.
Para educar a un perro, hay que tener paciencia y ser perseverante. Poco a poco, aprenderá a comportarse, a no tirar de la correa y a obedecer nuestras órdenes, algo esencial para una buena convivencia.