Consejos para lograr que la oficina sea un lugar saludable

De las 24 horas que tiene un día, lo habitual es que la jornada laboral dure 8, lo que se traduce en un tercio de nuestro tiempo. Es por esto que el lugar de trabajo es tan importante y que cada vez son más las empresas que prestan atención al espacio en el que sus empleados tienen que desarrollar las tareas. La calidad del aire o del agua, la decoración, la luz o la temperatura son solo algunos de los factores a tener en cuenta a la hora de acondicionar una oficina para que los trabajadores rindan lo máximo posible en un entorno confortable.

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Para conocer con detalle las características idóneas de un lugar bien acondicionado, nos hemos puesto en contacto con Pablo Muñoz, cofundador y CEO de Evalore, gabinete de consultoría y arquitectura que crea espacios que mejoran la salud y la sostenibilidad. Desde su empresa, Pablo no solo ha lanzado importantes consejos para mejorar la productividad y la salud de los empleados en las oficinas, sino que ha desvelado las consecuencias que puede tener en un trabajador un mal acondicionamiento de su espacio laboral.

Según este experto, las claves para mejorar la productividad y la salud de los empleados en sus oficinas serían las siguientes: 

• Aumentar la calidad del aire interior y del agua de consumo que se ofrece
• Adecuar la iluminación
• Incrementar el confort térmico y acústico
• Incorporar elementos naturales en el entorno.

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Lo primero que destaca el profesional es que el ser humano "está programado para vivir en un entorno natural, en contacto con el aire exterior sin contaminar y con la luz solar". El hecho de que en la actualidad pasemos el 90% de nuestro tiempo en lugares construidos y alejados de la luz del sol supone un gran impacto para los hombres, por lo que a la hora de adecuar los lugares de trabajo hay que respetar, en la medida de lo posible, las sensaciones exteriores. "Recordemos que el aire de los espacios interiores puede estar entre 2 y 5 veces más contaminado que el del exterior. Viciado de CO2 y lleno de contaminantes procedentes de materiales de construcción, mobiliario y productos de limpieza, puede llegar a causarnos enfermedades respiratorias, cardiovasculares y del sistema nervioso. Por otro lado, la limitación del contacto con la luz solar y la exposición a luz artificial de baja calidad y tono constante altera nuestros ciclos circadianos y puede causarnos problemas de estrés y trastornos del sueño", afirma Pablo Muñoz.

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Con respecto a cómo beneficia a las empresas el hecho de adecuar el lugar a las necesidades de los empleados, desde Evalore lo tienen claro: "Las empresas que optan por el camino de la salud y el bienestar de su espacio de trabajo están ofreciendo a sus trabajadores un entorno que va a reducir su estrés y mejorar su salud física y mental a medio-largo plazo, así como un entorno que fomenta la motivación".