7 consejos de 'running' para perezosas

por hola.com



Ilustración de Soledad Bravi para el libro Running para perezosas.


Correr es un deporte apto para cualquiera y sólo necesitas cogerle el truquillo para convertirte en una auténtica experta. Para ello, te proponemos el programa especial Running para perezosas (Lunwerg Editores), un libro práctico y divertido escrito por Marie Poitier, redactora jefe de Jogging International. Te servirá para empezar a correr desde cero en un tiempo récord de 4 semanas con los mejores consejos e ideas para hacer de tu entrenamiento un éxito. Como aperitivo, aquí van las más locas y eficaces que hemos encontrado en el libro:

  1. Un poco de trampa. Pon fragmentos de música en la playlist run que sólo puedas escuchar cuando corres y, así, si quieres oírlos, no tienes más remedio que ir a correr. También puedes jugar con las listas de música en función de tu humor y las sesiones que vayas a hacer (salida larga, fraccionada, recuperación).
  2. Corre en pareja. Si has conseguido que tu pareja se anime a correr contigo, puedes usarlo como motivación extra. Créale dificultades: una mochila cargada que llevar en la espalda, pesos en los tobillos… ¡No vas a negar que suena divertido!
  3. El plus que motiva. ¿Sabías que el running aumenta las prestaciones sexuales? Está demostrado científicamente. Con un corazón más musculoso, una capacidad respiratoria incrementada y una circulación sanguínea reforzada, vas camino de convertirte en Lady Gaga.
  4. Las nalgas de Laetitia Casta. El running pone las piernas bonitas, pero también las nalgas. Al correr se trabajan los glúteos medios y mayores y los músculos externos del muslo. Son las nalgas las que nos ayudan a extender y recoger el muslo, a estabilizar la cadera durante los cambios de apoyo y adquirir velocidad al propulsarnos. Así que mímalas y estíralas después del entrenamiento. Las necesitamos y mucho.
  5. Nada mejor para descubrir una ciudad. Las vacaciones son el paraíso para el running. Se corre sin obligaciones, con la mente despejada, se descubren miles de circuitos y montones de ideas para dinamizar el entrenamiento. 
  6. Sin presiones. Para librarte de todo el estrés y cambiar de distracción, opta de vez en cuando por una salida en plena naturaleza con el único objetivo de desconectar. También podrías incorporar ejercicios lúdicos o haz carreras fraccionadas tomando como referencia árboles, piedras, etc.
  7. Combina piscina y bici. Son un buen complemento al running y menos agresivos para los músculos y el corazón. Lo ideal sería nadar crol para tener el cuerpo bien alineado en el esfuerzo, pero, para eso, hay que dominar la técnica. Si no es el caso, opta por la braza un poco más exigente para las rodillas, las caderas y las cervicales. ¡También algunas posturas de yoga te ayudarán a estirar mejor!