¿El último antojo de Irene Rosales?
La esposa de Kiko Rivera comparte con sus fans su inevitable y dulce pasión en la recta final de su embarazo
La dulce espera de Irene Rosales está llegando a su fin. Kiko Rivera y su esposa están a punto de conocer por fin a la pequeña Carlota y cada paso que dan, antes de la feliz bienvenida, se convierte instantáneamente en noticia. Mientras Irene ultima los detalles para que todo esté listo para el gran día (ropita, habitación, silla para el coche), el Dj aprovecha cualquier instante de descanso de su trabajo para mostrar a sus miles de seguidores en las redes sociales los momentos más emotivos que está viviendo en familia antes de ver la cara de su tercer hijo.
En este caso, Irene ha sido la encargada de compartir con sus seguidores en las redes sociales uno de los aspectos que acompañan a muchísimas futuras mamás durante su embarazo: los inevitables antojos. Ha sido en una de sus últimas publicaciones efímeras, mientras la andaluza cuenta los días para la llegada de su hija, cuando ha querido mostrar una de las delicias de las que no se ha privado durante estas semanas de gestación.
En un apetecible ‘boomerang’, Rosales mostraba el postre que se ha convertido en su auténtica debilidad, como asegura en su post: Fresas de temporada aderezadas con una dulce leche condensada. Como ha manifestado en varias ocasiones en su propio 'site', Irene está disfrutando al máximo de esta etapa de su vida que ha transcurrido de una manera tranquila y sin sobresaltos. Un embarazo con el que, sin embargo, y como aseguraba en una de sus últimas entrevistas: "se ha notado más, físicamente que el de Ana".
Entrenamiento para embarazadas, sesiones de 'body paint' e incluso viajes al extranjero en familia…Durante estos nueve tranquilos meses, la sevillana ha hecho gala de las numerosas actividades que ha disfrutado sin que su estado haya sido impedimento para ninguna de ellas. El trabajo también ha sido parte de la apretada agenda de la mujer de Kiko en su dulce espera. Así, la hemos podido ver luciendo barriguita en la presentación de una conocida firma de cosmética capilar que amadrina o en la inauguración de una tienda de moda en Málaga, entre otros eventos para los que ha prestado su imagen como reclamo. Unos trabajos que, lógicamente, han pasado a un segundo plano en pro de la tranquilidad que requieren las últimas semanas de gestación.
Durante todo este tiempo, Kiko ha sido un gran apoyo para Irene y se ha encargado, en muchas ocasiones, del cuidado de su hija mayor para que Irene pudiera concentrarse al 100% en su embarazo. Unos meses que, en breve, llegarán a su fin y completarán la gran felicidad que reina en la familia.