Sus sorprendentes trabajos, su familia... lo que todavía no sabes sobre Pablo Motos
Es uno de los presentadores más conocidos de la televisión, lo sabemos todo sobre sus invitados, incluso los detalles más graciosos, pero ¿y sobre él? ¿Cómo fueron sus inicios? “Yo iba para electricista, porque había que hacer algo en la vida, a mí me gustaba la electrónica pero en mi pueblo no había electrónica” explicó. “Un día fui a la radio a hacer, porque era DJ, hice un programa en una discoteca y dije esto yo tengo que aprender a hacerlo bien”. Esta anécdota fue una de las muchas que contó el presentador Pablo Motos a Bertín Osborne, desvelando una faceta que seguramente muchos fans desconocían. Y es que lo más gracioso es que, según cuenta, después de escuchar a los que hacían el programa, nada menos que Iñaki Gabilondo y Luis del Olmo, pensó: “Qué mal hablo, tengo que aprender a hablar y me faltan palabras. Entonces me estudié el diccionario”.
Así nació su pasión por la radio, aunque hizo mucho más que ser locutor. “Era locutor de mañana, luego el comercial, luego el director... y era todo, locutor, comercia, director y la limpiadora por las tardes. Viví unos años maravillosos donde todo me lo guisaba y me lo hacía yo”. Sin embargo, este trabajo no convencía demasiado a sus padres así que tuvo que buscar otro paralelo: “Mi padre me decía que la radio en Requena no era un trabajo serio, me decía que si quería hacerlo, que lo hiciera los fines de semana. Yo le decía que no, que hago el programa de la mañana y me dijo, vale, haces el programa de la mañana y por la tarde vas a limpiar cristales en el hospital”. Y lo hizo.
Llegó después a Onda Cero Valencia y de ahí a una prueba con Julia Otero. “Julia me dijo te vamos a contratar, me gusta lo que haces, y eso qué haces tú que no hace nadie, que son los monólogos, que luego se pusieron de moda, me gustaría que hicieras un monólogo cada día y tal y te voy a fichar” contó Motos. A estas múltiples y dispares ocupaciones sumó la de compositor. “Sí que hice varias canciones, hubo un momento que hice una canción que ganó el festival de Benidorm, tengo que decir, antes de decirte que la canción era horrorosa, que yo la hice con buena intención” dijo Pablo.
El éxito de su programa El Hormiguero, que recibe a decenas de estrellas internacionales y nacionales, le ha obligado a dejar de tocar la guitarra por ejemplo, pero le ha dado mucho más. “El programa me da muchos más regalos de lo que pudiese esperar en la vida, está muy por encima de mi sueño más salvaje, pero también me quita mucho, me quita mi vida normal. Es verdad que vienen a verme los mejores del mundo, pero luego no puedo hacer muchas cosas que hacía”.
El tiempo que tiene después del trabajo lo dedica a su pareja Laura Llopis, con la que lleva nada menos que veinte año. “Me enamoré de ella en la radio, era mi productora, la veía tan guapa...”. Ella, junto a sus dos hijas, se ha unido a la aventura de Pablo. “Una es guionista y la otra en atrezzo, son guapísimas” comentó Pablo sobre las chicas. “Son dos chicas con talento y sobre todo son muy buenas personas. Laura es coordinadora de guiones...”. Todo queda en familia así que de vez en cuando hay algún que otro desencuentro. "Nosotros nunca discutimos en verano, pero en invierno hay fuego, ella tiene una personalidad muy fuerte y yo también y el programa lo hago yo y lo llevo yo y las decisiones las tomo yo, y hay enfrentamientos...".