Juan José Padilla, Sebastián Palomo Linares, el padre Ángel, Pedro J. Ramírez y Paloma Segrelles, entre muchos otros, dieron el pésame a la familia de Adolfo Suárez
Adolfo Suárez era un hombre muy querido, un presidente admirado y así ha quedado patente en su último adiós. Han sido muchos los que se han congregado en el Congreso de los Diputados para poder rendirle un homenaje en la capilla ardiente que ha abierto sus puertas al público al mediodía.
Tras el paso de autoridades y el pésame en privado del rey don Juan Carlos, que le ha impuesto a título póstumo el Collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III, los hijos, nietos y hermanos de Adolfo Suárez han recibido la visita de amigos y personalidades que se han acercado para darles el más sentido pésame.
Un momento muy emotivo ha protagonizado el torero Juan José Padilla y su mujer Lidia Cabello, grandes amigos de la familia, que se ha fundido en un emocionado abrazo con los familiares. El diestro ya se acercó al hospital tras conocer que el fallecimiento de Adolfo Suárez era "inminente". Una noticia que tristemente comunicó Fermín Urbiola, gran amigo y portavoz de la familia Suárez tras el triste desenlace.
Otros amigos como el Padre Ángel, el extorero Sebastián Palomo Linares, el exfiscal Ignacio Gordillo, la que fuera presidente del club Siglo XXI Paloma Segrelles o el exdirector del diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, junto a su mujer, Agatha Ruíz de la Prada, la periodista María Rey, esposa de Manuel Campo Vidal, han pasado ante el féretro del que fuera el primer presidente de la Democracia.
Se trata de la tercera vez en la historia reciente en la que la cámara baja acoge una capilla ardiente, tras la del expresidente Leopoldo Calvo Sotelo y la de Gabriel Cisneros, uno de los padres de la Constitución. El funeral de Estado se celebrará el 31 de marzo, a las 19.00 horas, en la catedral de La Almudena de Madrid, con la presencia de los Reyes y representantes de todas las instituciones del Estado.