Espejismos en el Salar de Uyuni, una porción extraterreste de la Tierra
En el Altiplano boliviano, a unos 200 kilómetros de la ciudad de Potosí, este lugar lleva muy a gala ser el desierto de sal más extenso y más alto del planeta, con sus 3.600 metros por encima del nivel del mar. Durante su época de lluvias las aguas que cubren su corteza blanca se convierten en un espejo, y así no hay quien distinga dónde acaba la tierra y dónde comienza el cielo.
Hay muchas posibilidades de acercarse al esplendor de este gran mar de sal que es el Salar de Uyuni, como incursiones de un día, recorridos completos, itinerarios a pie o a bordo de un todoterreno...
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Montones de sal preparada para su extracción en el Salar de Uyuni, que es la base de la economía de esta región boliviana.
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Detalle del interior del hotel Luna Salada, en Colchani, a las puertas del Salar boliviano de Uyuni, construido con bloques de sal.
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El Salar de Uyuni, con la Laguna Verde y el volcán Licancabur al fondo.
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Las llamas del altiplano, ejemplares que habitan los alrededores de la laguna Colorada, son una compañía constante en los recorridos por Bolivia.
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Feria de Tarabuco, punto de abastecimiento de la pobláción indígena en esta localidad a 65 kilómetros de Sucre.