Desafía al frío este fin de semana en la Montaña Palentina
Te proponemos una escapada al valle palentino de la Pernía, por donde baja, gélido, el recién nacido Pisuerga y sube la carretera más bella de cuantas unen la vieja Castilla con Cantabria. Abajo, Cervera de Pisuerga. Arriba, el puerto de Piedrasluengas. Por el camino, miradores que dejan sin habla, templos románicos y un roble de 500 años.
Mirador de Piedrasluengas, junto a la carretera de Cervera a Potes, cerca del límite con la vecina Liébana. Al fondo, los Picos de Europa / Foto: Rafael Ruiz-Ayuntamiento de Cervera de Pisuerga.
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Paisaje nevado del embalse de Vañes. Detrás, los robledales de la Pernía, una de las zonas preferidas por el oso pardo cantábrico / Foto: Rafael Ruiz-Ayuntamiento de Cervera de Pisuerga.
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La colegiata románica de San Salvador de Cantamuda, capital de la Pernía, en invierno / Foto: Turismo de Castilla y León.
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Vacas en Lebanza, en el frío paisaje del valle de la Pernía / Foto: Turismo de Castilla y León.
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La iglesia románica de Santa María de Mave, parte de un monasterio benedictino hasta la desamortización de Mendizábal en el siglo XIX / Foto: Rafael Ruiz-Ayuntamiento de Cervera de Pisuerga.
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Columna del monasterio de San Andrés de Arroyo.
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Iglesia románica de San Pedro, en Moarves de Ojeda.