En Chicago con Harrison Ford, una de sus estrellas en las galaxias
El actor está de celebración con el estreno de la séptima entrega de Star Wars. Hoy queremos rendirle homenaje a él y a la ciudad que le vio nacer hace 73 años, donde los rascacielos, las actividades al aire libre y la oferta culinaria no tienen comparación. Acompáñanos por la tercera ciudad más grande de Estados Unidos, una joya oculta llena de sorpresas.
CUNA DEL PRIMER RASCACIELOS DEL MUNDO
Todo el mundo que ha ido a Chicago, la ciudad de Harrison Ford, coincide en que es una ciudad increíble, casi tanto como Nueva York. Conocida como la ‘ciudad del viento’, posee uno de los skyline más vertiginosos del mundo, con algunos de los rascacielos más altos de América. En 1885 se construyó aquí el primer rascacielos del mundo, el Home Insurance Building. Desde entonces, el afán por tocar el cielo no ha cesado.
La Willis Tower, que entre 1974 y 1994 fue el edificio más alto del mundo y ahora el segundo más alto de Estados Unidos, superado solo por el One World Trade Center de Nueva York, posee un mirador único en el piso 103 de la torre, a 413 metros de altura, llamado Skydeck (theskydeck.com). Se trata de cajas de cristal que permiten a los visitantes observar a través del suelo la caída hasta la calle, ya que sobresalen de la estructura del edificio y se llegan a divisar tres estados: Indiana, Michigan y Wisconsin, además del impresionante lago Michigan.
Otro imponente edificio es el John Hancock. Si bien no es tan alto como el anterior, su silueta es conocida en el mundo entero. Sin duda, lo más sorprendente de este rascacielos es su mirador Tilt (360chicago.com/tilt), situado en la planta 94, a más de 300 metros de altura y solo apto solo para los más atrevidos, ya que los que osen asomarse a él deberán agarrarse a la estructura porque el ventanal se inclina 30º hacia el vacío, dejando al valiente espectador tumbado observando la caída.
DE PASEO POR LA CIUDAD VERDE
Lejos de las alturas, Chicago está llena de maravillas naturales. El lago Michigan es, sin duda, una de ellas. Se trata de uno de los cinco Grandes Lagos de Norteamérica y su extensión le convierte en el quinto más grande del mundo. La posibilidad de alquilar una bicicleta y recorrer sus orillas o disfrutar de un día de playa si el tiempo lo permite es un aliciente más para disfrutar al aire libre. Como visitar sus parques, sobre todo el Millenium Park, donde se encuentra la famosa escultura Cloud Gate o The Crowd, una de las fuentes más originales del mundo, una gigantesca pantalla donde van pasando fotos de ciudadanos de Chicago, creando la ilusión de que el agua sale de su boca. También un paseo merece el Grand Park, con una de las fuentes más grandes del mundo: The Buckingham Fountain.
¿PIZZAS O RESTAURANTES GOURMET?
La ciudad es conocida como “el secreto mejor guardado de la gastronomía de Estados Unidos”. Su fama es tal que posee su propia Guía Michelin, donde destacan con tres estrellas el restaurante Grace (652 W. Randolph Street) y el Alinea (1723 N. Halsted Street). Si quieres darte un capricho culinario no dudes en reservar en cualquiera de los dos, aunque existen numerosas opciones para chuparse los dedos. Si lo que prefieres es tener una experiencia inolvidable de gastronomía típica, las pizzas de Chicago son famosas en el mundo entero. Tanto la deep-dish, como la stuffed o la pan pizza son opciones deliciosas. Los mejores restaurantes para degustarlas son la Pizzeria Uno (29 E Ohio Street), Giordiano’s (730 N Rush Street), Burt’s Palace (8541 Ferris Ave, Morton Grove) o Gino’s East (162 E Superior Street). Si eres un verdadero amante de este manjar, no dudes en hacer algún Chicago Pizza Tours (chicagopizzatours.com).
SHOPPING PARA TODOS LOS GUSTOS
Como en toda gran ciudad que se precie, las opciones de shopping’ son variadas. Para compras de lujo entre rascacielos, The Magnificent Mile es tu lugar. Desde el río hasta Oak Street, las mejores marcas y firmas de moda alinean sus escaparates, combinadas con restaurantes y hoteles de lujo, mientras los espectaculares rascacielos se elevan imponentes. Si prefieres compras alternativas con un ligero toque hipster, los barrios del noroeste como Bucktown o Wicker Park congregan multitud de tiendas vintage y talleres de diseñadores emergentes. Para ir de mercadillos callejeros, el Randolph Street Market o el Maxwell Street Market merecen una visita. Hay Chicago para todos los gustos.