Un ‘show’ blanco bajo el Sol de Medianoche en la isla de Spitsbergen
Sube a bordo, porque empieza un crucero por el litoral más hermoso del mundo. Conocer esta Semana Santa la costa de Noruega es una experiencia casi tan insólita como poner rumbo al Polo Norte y llegar a esta isla conocida por los noruegos como Svalbard. Inmóvil en el océano Glaciar Ártico, vive en la soledad de saberse la comunidad más aislada del planeta. Todo sea por descubrir durante un inolvidable recorrido una de las costas más espectaculares del hemisferio norte.
Spitsbergen relaja la mente y agudiza los sentidos. Situado entre el mar de Barents y Groenlandia, este archipiélago surge del mar a las puertas de un océano helado. El aire es transparente, el viento frío, la atmósfera limpia, el paisaje agreste, los glaciares extensos, los icebergs azules, los valles anchos, la tundra infinita, los asentamientos dispersos, la población escasa, la fauna abundante, los osos temibles. La noche es eterna en invierno, el día mágico en verano. Se puede oler la pureza, sentir la soledad, escuchar el silencio.
Todo ello es posible descubrirlo embarcándose en un viaje de cinco días a bordo del barco MS Nordstjernen de la compañía Hurtigruten explorando la costa oeste de Spitsbergen, la isla más grande del archipiélago al que da nombre. Desde el lejano sur hasta el paralelo 80º, brinda uno de los paisajes polares más espectaculares del ártico. El inolvidable recorrido alcanza algunos de los asentamientos humanos más importantes del archipiélago y todo ello bajo la luz mágica del Sol de Medianoche y la fascinante posibilidad de ver ballenas, focas, morsas y osos polares. Durante unos días, la sensación será la de estar más cerca del Polo Norte que de ningún otro lugar.
El viaje tiene como punto de partida Longyearbyen, la capital de este archipiélago perteneciente a Noruega. Esta pequeña y moderna ciudad de apenas 1.500 habitantes, rodeada del inmenso paisaje ártico, tiene una historia relacionada con la minería de carbón y su patrimonio puede verse por todas partes. Después de hacer parada en otro asentamiento relacionado con la minería, Barentsburg, el itinerario continúa rumbo norte a lo largo de la costa de Prins Karls Forland.
La siguiente sorpresa será la de desembarcar en el fiordo Magdalenenfjorden. Descubierto en 1596 por el explorador holandés William Barents, pronto se convirtió en el centro de la industria ballenera del norte del archipiélago y hoy ofrece la experiencia de conocer la antigua estación de Gravneset, fundada a principios del siglo XVI por marineros británicos.
En el camino al norte y arropados por la majestuosidad del paisaje, el barco navega a lo largo del Woodfjord y el Liefdefjord, lo que permite admirar la belleza del impresionante glaciar de Mónaco. Si el estado del hielo lo permite, también se podrá tomar una zódiac y cruzar el paralelo 80 para experimentar la sensación de estar en ninguna parte, a la vez que disfrutando del avistamiento de ballenas.
Tras alcanzar la isla de Moffen, espera la bahía de Kings, el fiordo más largo de la costa noroeste de Spitsbergen. Un escenario tan variado como encantador, con grandes llanuras de tundra y picos alpinos e imponentes glaciares en el océano, como Krossfjorden, que se abre a los ojos como un paisaje de cuento helado.
A la entrada de la costa norte, la montaña Mitra saluda imponente, mientras que en el final del recorrido espera el majestuoso glaciar Kongsbreen antes de emprender la navegación hacia Ny-Alesund, uno de los grandes asentamientos históricos del archipiélago y la comunidad permanente más al norte del mundo. Nacida como explotación minera, su desarrollo moderno se debe, sin embargo, a las diversas estaciones científicas internacionales que acoge la población, entre las que destacan las del Alfred Wegener Institut de Bremerhaven, el Norsk Polarinstitut de Tromsø y el Instituto Polar Japonés.
De vuelta a Longyearbyen, final de este itinerario polar, solo queda cerrar los ojos y vivir de nuevo el sueño, en silencio, del paisaje blanco y brillante hecho realidad.
Más información
La compañía Hurtigruten ofrece varios itinerarios por la costa de Noruega en Semana Santa, con salida desde Bergen y Kirkenes. Y también otros, desde 1.249 € por persona, de cinco días de navegación a bordo del barco MS Nordstjernen por la isla de Spitsbergen, la mayor del archipiélago de Svalbard.