Una ruta por castillos de Bretaña ‘congelados’ en otra época
Paisajes marinos salvajes, valles rurales de un verde intenso y pueblos medievales y ciudades de arte que florecieron en torno a un castillo. Hemos elegido un puñado de estos para enlazar una ruta por esta región francesa.
CASTILLO DE FOUGÈRES
¿Dónde?
Erguido sobre un peñasco de esquisto, en el pueblo de cuento de Fougerés en la bretaña francesa.
¿Cómo es?
Una imponente construcción ideada en el siglo X como fortaleza militar y levantada en los siglos XII y XV que más parece una recreación del Exin Castillos. Más de una docena de torres a las que se sube y baja por escaleras de caracol; enormes murallas desde las que admirar un precioso paisaje verde; grandes terrazas donde se ubican cañones; puentes con fosa, pasarelas, almenas y ladroneras perfectamente conservadas.
Un dato curioso
Su entorno, a los pies de una montaña, convierte la visita en una experiencia aún más evocadora.
No te pierdas
Tras una caminata por el camino de ronda, tomar un buen café en el encantador pueblo que crece al abrigo del castillo.
CASTILLO DE JOSSELIN
¿Dónde?
En la bonita ciudad de Josselin, dominando la ciudadela y asomado a las apacibles aguas del río Oust.
¿Cómo es?
Una fortaleza de la Edad Media y una joya del Renacimiento, con imponentes torres reflejadas en el río. Entre sus maravillosas estancias destaca un comedor decorado según la moda del siglo XIX y un salón con una chimenea del XVI, bucólicos jardines repletos de flores y esculturas y un museo de muñecas instalado en los antiguos establos.
Un dato curioso
El castillo está habitado por la misma familia desde hace casi mil años, hoy es el decimocuarto duque de Josselin y senador de Francia.
No te pierdas
Surcar las aguas de los canales de Bretaña en una pequeña embarcación.
CASTILLO DE SUSCINIO
¿Dónde?
En la península de Rhuys, entre el Atlántico y el golfo de Morbihan, rodeado de marismas y suaves playas donde encuentran refugio muchas aves protegidas.
¿Cómo es?
Un recorrido por el adarve de este castillo mandado construir por el duque de Bretaña transporta a otra época, a la de unas lujosas vacaciones... medievales. Viendo su impresionante muralla y sus desafiantes torres cuesta creer que esta sea una casa de playa de nobles, pero la verdad es que fue ideado, ya en el siglo XIII, como residencia de vacaciones y de caza.
Un dato curioso
El castillo mantiene el ánimo de relajo con el que fue concebido gracias a numerosos espectáculos de teatro, música y danza que se dan cita en él.
No te pierdas
Disfrutar de los pequeños puertos, calas o costas de ensueño en la península de Rhuys.
CASTILLO DE VITRÉ
¿Dónde?
En la localidad del mismo nombre y dominando desde un peñasco el valle del río Vilaine.
¿Cómo es?
Es uno de los mejores ejemplos de arquitectura militar de la Edad Media en Bretaña. De un delicado estilo gótico y curiosa planta triangular, la fortaleza se levanta sobre una edificación de madera de hace mil años y recuerda su papel defensivo. En el siglo XI fue construido en piedra y reformado en varias ocasiones, la última, a finales del siglo XVIII, tras un incendio. Sus muros han sido testigo de grandes batallas y, cuando Vitré se abrió al protestantismo, se convirtió en bastión de hugonotes. Hoy, es la sede del ayuntamiento.
Un dato curioso
Para acceder al castillo hay que atravesar un puente levadizo de los de verdad.
No te pierdas
Visitar el interesante museo que acoge, que recuerda todas las historias de las que fue testigo.
CASTILLO DE FORT LA LATTE
¿Dónde?
En las Costas de Armor, entre las rocas del acantilado del cabo de Fréhel, dominando el mar.
¿Cómo es?
El lugar donde se emplaza este castillo del siglo XVI, un tapiz de hierba verde sobre el intenso azul del mar rompiendo en las rocas, es de una belleza salvaje. Precisamente el camino hasta el castillo desde el faro de Fréhel es uno de los mayores alicientes de la visita. El sendero que discurre paralelo a los acantilados ofrece una panorámica espléndida del litoral bretón, mientras se espía a alguna de las muchas aves marinas que habitan el lugar.
Un dato curioso
Fue el escenario elegido para el enfrentamiento final entre Kirk Douglas y Tony Curtis en la película Los vikingos.
No te pierdas
Las inolvidables vistas al mar desde el fuerte.
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