Tres aventuras ecoturísticas en Zambia, la llamada de África
Un antiguo cataclismo, un paraíso de hipopótamos y la mayor migración del mundo protagonizan la llamada más natural de Zambia. Lugares que han de explorarse una vez en la vida en África meridional.
No hay quien salga de su asombro escuchando el rumor de las cataratas Victoria a varios kilómetros de distancia. En Zambia, uno de los países más legendarios de Africa meridional por sus vastos y poco conocidos paisajes, explorar la cuenca del río Zambezees seguir los pasos de un misionero obstinado, el doctor Livingstone, cuyo empeño en ampliar los conocimientos geográficos sobre el continente africano y cristianizar a sus habitantes lo llevó a ser el primer europeo que vio las cataratas.
Livingstone recorría uno de los países menos poblados y más admirados entre los viajeros apasionados de África. Los custodios de su riqueza natural, con sencillez y sin saber de ecología o sostenibilidad, son 72 grupos étnicos. Uno de ellos, la tribu de los Kololo denominó al extraordinario salto orográfico que el río salva en la frontera entre Zambia y Zimbabue como Mosi-oa-Tunya o el humo que truena. Y con razón. A lo largo de 1.708 metros y desde sus 108 metros de altura, el río derrama una cortina de agua por la que fluyen 500 millones de litros de agua por minuto. Es la catarata más larga del mundo, una espectacular explosión de la que surge una constante una nube de vapor de agua que crea sucesivos arco iris que se solapan entre sí. Y eso, incluso, admirándolas fuera de la época de lluvias –entre diciembre y abril-, cuando su caudal es mayor.
Este fue el espectáculo ante el que Livingstone se encontró al divisar una de las cataratas más hermosas del mundo a las que el explorador escocés nombró en honor a su reina. La profunda hendidura terrestre por la que se despeña el Zambeze, el río más largo de Africa meridional, se abre a través de una meseta de basalto, desde la que salta al vacío. Después, sus aguas siguen corriendo presurosas a través de su curso medio, que se encajona en un desfiladero de 200 kilómetros.
Situadas al sur, las cataratas son la estrella turística del país y las facilidades de alojamiento y excursiones por el río son amplias, incluso para los más atrevidos, que encontrarán en la piscina Devil’s Pool un baño escalofriante, una piscina de roca natural cercana a la isla Livingstone, el lugar en que el explorador quedó atónito al contemplar la belleza de las cataratas y desde la que afirmó que escenas tan extraordinarias debían ser las que veían los ángeles al volar. Desde allí, solo durante la estación seca, se accede nadando a esta cubeta situada en el borde superior de la cascada. Los que no sufran de vértigo incluso pueden asomarse para admirar el agua despeñándose un centenar de metros y a la nube de vapor.
Al este del país, en un paisaje de sabana salpicado de árboles y pastos que fertiliza el río Luangwa, el río más inalterado del continente, se aglutina una extraordinaria muestra de vida salvaje. Para descubrirla nada mejor que enfrentarse a la emoción de recorrer a pie los senderos del Parque Nacional South Luangwa. Las excelentes oportunidades de este parque nacional para caminar a través de una naturaleza intacta a la búsqueda de su fauna, con mayor probabilidad en las proximidades del río, lo sitúan como uno de los mejores destinos ecoturísticos del mundo.
Así uno podrá hallarse frente a familias de jirafas, zebras o los numerosos grupos de ñus, elefantes, búfalos o tal vez distinguir alguna de las 14 especies de antílopes que pueblan el parque. La experiencia es intensa en todo momento, aunque los minutos más emocionantes se los reserva una vez más el curso fluvial o sus inmediaciones, ya que es en él donde se divisan los hipopótamos y cocodrilos del parque. No es posible dudar del encuentro con un hipopótamo ya que el parque presume de albergar una densidad de 50 ejemplares por kilómetro.
No es para menos la riqueza en aves de este espacio, sobre todo al final de la estación seca, cuando la disminución hídrica permite divisarlas fácilmente en las láminas someras de agua del río y las lagunas cercanas. El río es un paraíso para las garzas, grullas y cigüeñas, a las que se unen las aves migradoras que abandonan el invierno del norte de Europa llegadas de lugares tan lejanos como Rusia.
Kasanka es uno de los parques nacionales más pequeños de Zambia, pero, sin embargo, el que esconde una de las mayores sorpresas. Su variedad de entornos alberga numerosas especies de animales, lo que le convierte en un privilegiado santuario natural cuyos habitantes salvajes se han salvado de la caza ilegal que amenazaba a este espacio protegido con desaparecer hace una década.
Hoy, los amantes del turismo de naturaleza acuden a descubrir sus numerosas especies de aves y mamíferos, como el sitatunga, un antílope de hábitos acuáticos que frecuenta las zonas húmedas con las primeras o últimas luces de la jornada. No obstante, la estrella natural de los atardeceres durante los meses de noviembre y diciembre es el murciélago de la fruta, ya que es cuando tiene lugar la mayor migración de mamiferos del mundo, llevada a cabo por los murciélagos más grandes del sur de África.
Alrededor de 5 millones de murciélagos de la fruta de color anaranjado, atraídos por los aromas de los frutos maduros de la zona comienzan a llegar con el inicio de octubre. El espectáculo diario apenas dura media hora y comienza con el atardecer. Inicialmente son los murciélagos con función exploradora los que parten desde las ramas y troncos, donde fijan su residencia y pasan el día durmiendo colgados en la vertical, en busca de los frutos más cercanos, pero el momento más impresionante ocurre cuando millones de murciélagos emprenden el vuelo simultáneamente dispersándose en todas direcciones y creando una visión natural inolvidable, además de uno de los más sobresalientes espectáculos de vida salvaje del mundo.
GUÍA PRÁCTICA Cómo llegar Disfrutando de la gastronomía con base tradicional holandesa y toque internacional del afamado chef Sergio Herman (3*Michelin) en la World Business Class de KLM (klm.es) que vuela directo a Lusaka desde Amsterdam. Dispone de 5 vuelos diarios desde Barcelona y Madrid a la capital holandesa.
Mejor época para viajar Para recorrer los parques es aconjesable viajar durante la estación seca, de mayo a septiembre. La estación de lluvias va de diciembre a abril y es cuando el país luce su apariencia más exuberante.
Más información Turismo de Zambia, zambiatourism.com.