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MAÑANA
La mejor manera de conocer la ciudad es tomando como punto de partida la céntrica plaza del Castillo. Por la calle Estafeta, esa donde los toros de los encierros más problemas dan a los mozos, y luego la llamada Curia se llega a la suntuosa Catedral (catedraldepamplona.com), de estilo gótico francés, donde hay que entrar para admirar su elegante claustro y, sobre todo, para emprender un viaje en el tiempo a través de Occidens, una exposición permanente que poco tiene que ver con una exposición al uso y mucho con una emocionante experiencia que permite reflexionar sobre la historia de Occidente.
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Junto a ella queda la bellísima plaza de San José, que el primer sábado de cada mes acoge el afamado mercadillo las Buenas Pulgas, de antigüedades, mientras en las calles adyacentes proliferan tiendas de decoración. Tras asomarse al mirador del rincón del Caballo Blanco, la parte más alta del Bastión del Redín, el recorrido histórico lleva a las murallas, que rodean buena parte de la ciudad y ofrecen deliciosos paseos con vistas sobre el valle del río Arga.
Por el paseo del Redín se llega callejeando hasta la imponente torre de la iglesia de San Cernín, una de las más emblemáticas de la ciudad y cuyo reloj marca puntual año tras año el inicio de los Sanfermines. No muy lejos queda otro protagonista de la fiesta, el Ayuntamiento, escenario del chupinazo que simboliza su inicio tras lanzar un cohete después del saludo habitual ¡Gora (Viva) San Fermín!.
También habrá que pasar por la Ciudadela, un hermoso parque que antaño sirvió para defender la ciudad, y por la iglesia de San Lorenzo, famosa por guardar la diminuta imagen de San Fermín.
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COMIDA
A la hora de la comida, lo mejor es abandonarse al tapeo pamplonica por el centro de la ciudad y, sobre todo, por la calle San Nicolás. Hay mucho donde elegir: desde el vanguardista El Mercao (elmercao.com), con menús especiales para este San Fermín y que este año ha recibido el premio de Oro en la Semana del Pincho de Navarra (semanadelpincho.es) por su pincho Tubertxerri, una falsa trufa que homenajea a la cocina navarra con un toque tailandés. En el muy aclamado Baserriberri (San Nicolás, 32, baserriberri.com), hay que probar su cocina creativa adaptada a la cocina tradicional navarra, una experiencia nueva y diferente. Han recibido varios premios en la Semana del Pincho -primer premio en 2017, 2019 y en 2022 premio de Plata a su pincho Irati- y su delicosa croqueta de pulpo e ibérico recibió el segundo premio en la Semana de la Croqueta en 2021.
En la calle Espoz y Mina el Bar Gaucho (cafebargaucho.com), especializado en pinchos, ofrece productos de calidad a buen precio. Y en la calle Mercaderes, cerca de la Catedral, Iruñazarra (irunazarra.com) merecedor de varios premios en la Semana del Pincho, una apuesta segura. La vinoteca La Botería (barlaboteria.com), ofrece originales vinos y una estupenda terraza frente a la plaza de toros. Cualquiera de ellos es también una estupenda opción de tapeo para la cena.
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SOBREMESA
En pleno centro histórico de la ciudad, en la plaza del Castillo, el Café Iruña (cafeiruna.com) es un acristalado café de toda la vida que sigue conquistando al público por la calidad de sus productos y su rincón más auténtico dedicado a un Hemingway eterno.
TARDE
Pamplona es ideal para ir de tiendas. Aquí, renovar el armario con las últimas tendencias es un placer fácil. La oferta de tiendas es enorme y muchas se encuentran alrededor de la calle Carlos III, con tiendas de espacios elegantes y luminosos donde adquirir las últimas propuestas en moda. También en las comerciales avenida de Roncesvalles y la calle García Ximénez abren sus puertas varias tiendas de moda.
Entre las direcciones más recomendadas para ropa moderna: MG (mgpamplona.com), un espacio de estudiado diseño; MV LasPalas (mvlaspalas.com), uno de los mejores y más celebrados escaparates de la ciudad, y Ruhna (Comedias, 19) con piezas únicas más artesanales. Para zapatos, la especializada en firmas de lujo Fini Belzunegui (Felipe Gorriti, 36), y muebles recuperados en La Cabina (lacabinamuebles.com). Y si lo que se va buscando es delicatessen: la Vinoteca Murillo (vinotecamurillo.es) y para dulces la confitería Layaya (pastaslayana.com), de las de toda la vida, o las pastas artesanales de Pastas Beatriz (pastasbeatriz.es) donde morir de amor con sus txandrios, una especie de rosquilla típica del desayuno navarro, o sus afamados garrotes, un hojaldre artesanal con diferentes rellenos.
Por las calles del casco antiguo abren tiendas más pequeñas, cuidados comercios locales donde adquirir un poco de todo, y en la calle Estafeta tiendas de souvenirs para los que buscan cualquier cosa relacionada con los encierros.
NOCHE
Después del arranque consumista, lo mejor será echar un vistazo a las propuestas del elegante Teatro Gayarre (teatrogayarre.com) y decidir si vale la pena darse un descanso disfrutando de su siempre variada oferta. A la hora de la cena los muy sibaritas pueden optar por alguna de las estrellas Michelin de la ciudad como Rodero (restauranterodero.com), que también ofrece menús especiales para San Fermín, la cocina de mercado de Ábaco (abacorestaurante.com) con dos soles Repsol, o la cocina de raíces de Pilar Idoate en el restaurante Europa (hreuropa.com) con un excelente menú degustación.
PARA EL DESCANSO
Para acabar el día, nada como haber reservado una noche en el mítico Gran Hotel La Perla (granhotellaperla.com) para entender mejor la rica historia de Pamplona, ya que por el pasaron y dejaron su impronta personajes tan ilustres como Hemingway, capaz de convertir a los Sanfermines en una peregrinación para muchos norteamericanos y cuya habitación es la más codiciada, pero también, otros ilustres como de la talla de Alfonso XII, Alfonso XIII, Orson Wells, Sarasate, Chaplin… Junto a ellos, los nombres contemporáneos que siguen engordando su libro de citas y que tampoco quieren perderse una noche aquí. Rodeado por las muralla el Hotel Pamplona Catedral (pamplonacatedralhotel.com), un cuatro estrellas ubicado en un antiguo convento del siglo XVI rehabilitado.
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