Cada 14 de noviembre, el mundo conmemora el Día Mundial de la Diabetes, una enfermedad crónica cuyos casos aumentan cada año. Sólo en España, padecen esta patología casi 5 millones de adultos y alrededor de 130.000 niños y adolescentes, según datos de la Sociedad Española de Diabetes.
¿La razón del aumento? Los expertos apuntan a que los hábitos de vida actuales, marcados por un mayor sedentarismo, con el consecuente aumento del sobrepeso y la obesidad, están repercutiendo en un incremento de la diabetes tipo 2 en todo el mundo, mientras que las complicaciones crónicas asociadas a un mal control de la enfermedad, como la retinopatía, la nefropatía y la neuropatía, siguen en aumento también en personas con diabetes tipo 1. “Los datos indican que el 60% de estos pacientes no alcanza un control óptimo de la enfermedad, es decir, de los 246 millones de personas que padecen diabetes tipo 2 en el mundo, en torno a 150 millones tienen un nivel de glucosa en sangre superior al objetivo”, explica el doctor doctor Javier Salvador, presidente de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
Prevenir y diagnosticar a tiempo
Parece una frase ya hecha, que no nos cansamos de repetir, pero es que es cierta: hay dos pilares básicos, la prevención, a través de la adopción de hábitos de vida saludables, y el diagnóstico precoz de la diabetes tipo 2, con el fin de comenzar el tratamiento de la misma cuanto antes y evitar o retrasar posibles complicaciones asociadas a un mal control glucémico. “Casi la mitad de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 ya tienen al menos una complicación asociada a un mal control de la glucemia en el momento del diagnóstico de la diabetes tipo 2”, explica el doctor Martín López de la Torre, coordinador del Grupo en Diabetes de la SEEN. “A este respecto, es fundamental que consulten con su médico las personas con algún factor de riesgo de diabetes tipo 2 o enfermedades asociadas, como son tener antecedentes familiares de diabetes, sobrepeso u obesidad, hipertensión arterial, enfermedades de los lípidos o antecedentes de diabetes durante la gestación. Esta recomendación cobra importancia a partir de los 45 años”.
Numerosas iniciativas
La Federación de Diabéticos Españoles (FEDE) ha programado una serie de actividades para concienciar a la sociedad sobre la importancia de mejorar la educación y prevención y, de esta forma, aumentar la calidad de vida de las personas que la padecen y reducir la incidencia de esta enfermedad crónica en el futuro.
En este sentido, desde FEDE se ha puesto a disposición de todas las personas un espacio en la plataforma online change.org para que todo aquel que quiera se una a la petición realizada por FEDE a la ministra de Sanidad, y que se resumen en el siguiente objetivo: mejorar la educación y la formación en diabetes, y que precisamente es el mensaje clave de este año para celebrar esta jornada. Además, entre otras iniciativas, también se ha organizado la II Carrera y Caminata Popular por la Diabetes en Madrid, una cita prevista para el próximo domingo 17 de noviembre promovida por la Asociación de Diabéticos de Madrid y la Fundación para la Diabetes, y que cuenta con el apoyo de FEDE.
El ejercicio, buen aliado
Dentro de los hábitos de vida saludables, fundamentales en la labor de prevención, el ejercicio físico ocupa un papel importante. “La mejor manera de prevenir la diabetes tipo 2 es realizando actividad física de forma regular, complementada con una buena alimentación”, afirma Keila Montejo, directora técnica del centro deportivo GO fit Torrejón, quien recomienda incluir más actividades físicas en nuestra rutina diaria. Hay tres tipos de actividad que pueden ayudar a las personas que padecen diabetes, esto es, los ejercicios aeróbicos, de fuerza muscular y de estiramiento.Y junto al ejercicio, una dieta equilibrada para prevenir la obesidad. Según Álex Pérez, nutricionista de GO fit, “el ejercicio es un factor de protección frente a la resistencia a la insulina y la regulación de la glucosa en sangre, pues hace que las células musculares sean más sensibles a la acción de la insulina y así el contenido de glucosa en sangre se vea mejor controlado. La alimentación, mediante la regulación de la cantidad y el tipo de carbohidratos, tiene una gran importancia en el control de la enfermedad”.
El médico o enfermera es quien debe adaptar las raciones de alimentos a su ritmo de vida y actividad física, y la pauta de insulina o medicación que tome para el control de la enfermedad.
Pie diabético, una complicación habitual
Con motivo de esta jornada, desde el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) han recordado que la diabetes es una de las enfermedades con mayor repercusión en los pies y es necesaria la realización de controles sanitarios exhaustivos para evitar complicaciones mayores.
Según se ha señalado desde el ICOPCV la neuropatía (pérdida de sensibilidad que provoca que el paciente no perciba traumatismos y agresiones externas, que en casos normales son advertidos, y el aumento de las presiones en el pie), haber tenido con anterioridad úlceras y las amputaciones previas son los principales factores de riesgo de las personas que padecen esta enfermedad para desarrollar una úlcera. De hecho, diferentes estudios han señalado que España es el segundo país con mayor número de amputaciones de los miembros inferiores por diabetes del tipo 2.
Además de la neuropatía y de la enfermedad vascular periférica (pie isquémico), la infección es otro factor que puede favorecer el empeoramiento del pie diabético. El pie isquémico se presenta con una piel brillante y atrófica, los pulsos son débiles o están ausentes, las uñas aparecen engrosadas y los talones suelen presentar fisuras. “Desde el ICOPCV consideramos que es fundamental que el servicio de atención podológica esté incluido dentro de la Sanidad Pública para el caso de pacientes de riesgo como es el de las personas que padecen pie diabético. En este caso, está demostrado que la detección precoz y la realización de tratamientos preventivos contribuyen a reducir considerablemente complicaciones mayores y los altos costes personales y sociales derivados de una amputación”, ha destacado Alfredo Martínez, presidente del ICOPCV
Útiles consejos
1.- Utilizar un calzado adecuado y flexible que se adapte al pie sin presionarlo.
2.- Los tratamientos con quiropodias (eliminación de durezas y cortado de uñas) deben ser realizados por un podólogo para evitar cualquier tipo de complicación o lesiones en los dedos como uñas encarnadas, infecciones o hematomas subungueales.
3.- Hidratar diariamente para evitar la sequedad, de forma que la piel quede más flexible y se evite la aparición de fisuras o úlceras. Nunca hidratar entre medio de los dedos, macera la zona y puede provocar cortes.
4.- Realizar un estudio biomecánico y utilizar plantillas a medida para minimizar el exceso de presión sobre puntos concretos del pie y así ayudará a evitar la aparición de úlceras.
5.- Es fundamental realizar exploraciones visuales y controles con frecuencia para comprobar que no hay lesiones y si las hubiera se debe consultar con el especialista por pequeñas que estas sean. El podólogo valorará su importancia y le indicará el tratamiento correcto. Los autocuidados y la auto inspección diaria es clave para la detección precoz de cualquier lesión en el pie.