Piensa por un momento en tu entorno y seguro que es probable que conozcas a alguien, cercano o conocido, que padezca o haya padecido cáncer de mama. Y, lo más importante en un día como hoy es que tal vez conozcas también a alguien que ha sobrevivido a la enfermedad. Ese es el objetivo: aunque cada vez se diagnostican más casos de cáncer de mama, lo cierto es que cada vez son más las mujeres que consiguen vencer la batalla a la enfermedad, gracias, en gran medida, a los avances en la detección precoz.
Precisamente hoy, se celebra en todos los rincones del planeta el Día Mundial contra el cáncer de pecho, un día en el que el rosa es el color que une a todos los que quieren manifestar su apoyo a esta cruzada solidaria, que se plasma en la realización de mil y una iniciativas con dos objetivos prioritarios: concienciar a la población sobre la repercusión de esta enfermedad y recaudar fondos que se destinen a la atención a las enfermas y, en gran medida, a la investigación. Y es que cada pequeño paso que se da en los laboratorios es un gran salto de esperanza para todas las mujeres. “Teniendo en cuenta que el cáncer de mama está aumentando su incidencia en los países desarrollados, el apoyo a la investigación y el trabajo que realizamos en estos grupos son las única vías para seguir avanzando en la curación y manejo de esta enfermedad”, asegura el presidente del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM), el doctor Miguel Martín.
Por su parte, Isabel Oriol, presidenta de la Asociación Española Contra el Cáncer, ha aprovechado esta conmemoración para dirigirse a las mujeres con cáncer de mama y “hacerlas saber que en la asociación podemos y queremos ayudarlas, porque un soporte profesional puede mejorar mucho su calidad de vida”. Oriol también quiso lanzar un mensaje de alerta al subrayar que “se deben mantener los niveles de participación en los programas poblacionales de cribado de cáncer de mama y, sobre todo, que la situación socioeconómica que estamos viviendo no afecte a la atención multidisciplinar necesaria en el abordaje del cáncer de mama”.
Desde esta asociación también insisten en la importancia de la investigación y, de hecho, apuestan decididamente por financiar proyectos de investigación oncológica en este tipo de tumor.
La detección precoz es, en ocasiones, vital
Los expertos, insisten, además, en la importancia de la detección precoz. Por eso, es importante concienciar a las mujeres para lograr que “no dejen pasar su cita” con los programas de cribado -que suponen la realización de las mamografías preventivas-. Así, según apuntan en el Instituto Oncológico Teknon -que realiza una fuerte campaña de detección precoz- se estima que 1 de cada 12 mujeres desarrollará un cáncer de mama a lo largo de su vida. Pero inciden, una vez más, en que no todo son malas noticias, pues los casos de mortalidad son prácticamente nulos entre las mujeres que se someten a pruebas de detección precoz de forma regular. El mensaje es claro: una mamografía puede salvarte la vida.
Pero, ¿qué pasa una vez que se confirma el diagnóstico? “La información es fundamental para las mujeres con cáncer de mama”, apunta Antonia Gimón Revuelta, presidenta de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA). Una buena ayuda puede ser el manual Hablemos de cáncer de mama, que cuenta con el aval científico de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), con la colaboración FECMA. “Esta guía ofrece una información veraz, completa, rigurosa y comprensible, para que la mujer comprenda la patología y los tratamientos y pueda aclarar dudas y superar miedos”, explica Gimón.
En esta útil herramienta se ofrecen consejos prácticos para la convivencia con la enfermedad, así como orientaciones sobre cómo superar el momento del diagnóstico o el momento posterior a una mastectomía, consejos sobre alimentación, comunicación con el médico y con la familia, rehabilitación o los controles periódicos tras la remisión. Aspectos que están incluidos como parte del proceso de adaptación de la mujer a su enfermedad, a su tratamiento y a los posibles efectos secundarios, tanto físicos como psicológicos.
El cáncer de mama, el más conocido por los españoles
Estamos ante un tumor que, según el OncoBarómetro de la aecc, presentado en septiembre pasado, es el más conocido por la población. El 60% de los españoles de media manifiesta que de este tipo de tumor es del que más ha oído hablar. Al ser un tumor femenino, son las mujeres en un 71% quienes más declaran tener información sobre el cáncer de mama. Además, datos recientes apuntan que el cáncer de mama es el segundo tumor más frecuente, tras el colorrectal, con más de 20.000 nuevos casos al año en nuestro país, 44 al día.
No bajar la guardia
Según Jordi Estapé, catedrático de Oncología y Director Científico de FEFOC (Fundación por la Educación y la Formación en Cáncer), el riesgo de desarrollar cáncer de mama aumenta progresivamente con la edad, pero la percepción y conocimiento de este riesgo es escaso entre las mujeres mayores. En este sentido, Estapé habló de “paradoja”, ya que este grupo de riesgo tiene menos atención a los síntomas, y una baja participación en los programas de detección precoz a partir de los 69 años: “Un 50% de mujeres de 50 a 59 años son diagnosticadas mediante las campañas, frente al 6% entre mujeres de 75 y 79 años. Esto supone que tengan estadios más avanzados, que reciban menos tratamientos y, por lo tanto, que tengan menos posibilidades de curación”.
Asimismo, el catedrático de Oncología destacó que el pronóstico del cáncer de mama ha mejorado mucho por el diagnóstico precoz de la enfermedad: “Gracias a las mamografías se descubren el 50% de los casos con cáncer de mama, y el otro restante por los médicos, por el nivel de concienciación social y por la labor de los medios de comunicación”. Además del diagnóstico precoz, Estapé recomendó hacer ejercicio físico continuado y la dieta mediterránea para disminuir el riesgo de padecer la enfermedad.
Por su parte, Tania Estapé, de la Fundación FEFOC, hace hincapié en los aspectos psíquicos y la percepción social que se tiene de la enfermedad: “La palabra cáncer se sigue relacionando con la muerte, las mujeres lo ven como una amenaza, y a veces no terminan nunca de sentirse curadas, sienten que continúan con las secuelas de antes”. Según precisa es lo que se conoce como el “Síndrome de la espada de Damocles”, entre un 20 y un 25% tienen estrés postraumático, piensan que la enfermedad se va a repetir, de ahí la importancia de este tipo de campañas que complementen la labor de los hospitales y especialistas.
Y es que, cuando la enfermedad se detecta en una fase temprana, los índices de supervivencia se incrementan mucho. “Espero y deseo un futuro sin cáncer de mama”, afirmaba recientemente la actriz Liz Hurley, embajadora de la campaña que cada año realiza la firma Estée Lauder contra la enfermedad. Ese es, sin duda, el deseo compartido en un día como hoy.
Iniciativas solidarias en todos los rincones del planeta
Cosmética benéfica
Tal y como hemos visto con la colaboración de Avon y Estée Lauder con esta causa, el mundo de la cosmética también se implica en esta particular cruzada. Un ejemplo más lo tenemos en la firma I.C.O.N, que ha lanzado un nuevo producto para el cabello que colaborará a recaudar fondos para investigación de este tipo de cáncer. "Podría sonar típico, pero éste es algo personal. Este producto reconstructor sin aclarado único y ligero ayuda a recaudar dinero para la búsqueda de una cura para el cáncer. ¿Por qué? A mi hermana le han diagnosticado recientemente cáncer de mama. Hace años perdí a mi madre debido a la enfermedad. Y yo tengo una hija. Encontrar una cura se ha convertido en mi causa. Este vaporizador revolucionario ayuda, ya que un porcentaje de cada venta se dona a fundaciones de investigación del cáncer", apunta Chiara Scudieri, creadora de la firma.
Moda solidaria
La moda y la solidaridad se dan cita en el Centro Comercial Sexta Avenida de Madrid, dentro de la iniciativa Causa & Seducción, con un desfile solidario (el próximo día 22) de los seductores e impactantes corsés de Maya Hansen, presentado por los periodistas Luján Argüelles y Miguel Ángel Nicolás, a beneficio de la Fundación CRIS contra el Cáncer, con un mensaje claro: El cáncer no te resta belleza. El evento se completa, hasta el sábado, con otras iniciativas, como un concurso de microrrelatos a través de las redes sociales que recaudará fondos para dicha fundación, una exposición retrospectiva de los corsés de Maya Hansen, y una muestra del trabajo de la peluquera Ángela Navarro, muy implicada en su labor con pacientes oncológicos, para los que desarrolla tanto productos cosméticos como pelucas y otros elementos. “Nosotros creemos que la investigación es lo único que, a largo plazo, puede vencer al cáncer. El cáncer no espera y a través de la investigación podemos ir ganando tiempo para poder salvar cada vez más vidas. Es un reto enorme y solos no podemos”, apunta Diego Megía, presidente de CRIS contra el Cáncer.
El mundo del cava también se une
El Presidente del Grupo Gramona, Xavier Gramona, explicó que se destinarán 4 euros de cada botella vendida de Rosé Brut Reserva para financiar una campaña promovida por la Fundación FEFOC y la Fundación Bamberg, que pretende fomentar la información sobre la enfermedad en las personas mayores.
Para ello, esta bodega de cava pondrá a la venta un total de 10.000 botellas de su cosecha de 2008 con un diseño realizado especialmente para la ocasión, rosa como tributo a la mujer y a la superación del cáncer de mama.