La Familia Real de Suecia se reúne con la Familia Real de Dinamarca para celebrar el bicentenario de la dinastía Bernadotte
La princesa Victoria acaparó en la localidad danesa de Helsingør la mayoría de los gritos y ovaciones, a los que respondió con su habitual simpatía
Las Familias Reales sueca y danesa se unieron hoy para participar en una ceremonia conmemorativa del bicentenario de la llegada del mariscal francés Jean Baptiste Bernadotte a Suecia para convertirse en Príncipe Heredero a la Corona.
Los Reyes de Suecia, acompañados por los príncipes Victoria y Daniel y el príncipe Carlos Felpe, llegaban esta mañana a Dinamarca para asistir a los actos conmemorativos del Bicentenario de la dinastía Bernadotte. Cruzaron en el barco Amfitrite el corto trayecto desde la sueca Helsingborg a la danesa Helsingør, dos preciosas ciudades separadas a poca distancia por el mar. Allí la reina Margarita y su hermana, la princesa Benedicta, primas del monarca sueco, fueron a recibirles personalmente, dada la buena relación que existe entre ambas familias. La gran ausente fue la princesa Magdalena, que acude a pocos eventos sociales desde que rompió su compromiso matrimonial en abril pasado, y permanece estas últimas semanas en Estados Unidos, donde trabaja para la ONG de ayuda a los niños Childrenhood, que dirige su madre.
La comitiva se dirigió a la antigua sede del Consulado sueco, donde Bernadotte renegó del catolicismo para convertirse al luteranismo. Tras celebrar un almuerzo, los miembros reales regresaron de nuevo a Helsingborg -emulando el viaje que justo hace 200 años hizo el mariscal napoleónico- para continuar las celebraciones que conmemoran el nacimiento de la dinastía que lleva su apellido. Cientos de personas se congregaron en ambas ciudades para saludar a la distinguida comitiva pese a la lluvia y el frío. Este es el primer viaje oficial al extranjero junto al resto de los miembros de la Familia Real sueca que realiza el príncipe Daniel, Duque de Vastergötland. El joven se mostró en un discreto segundo plano, mientras que la princesa Victoria acaparó en Helsingborg la mayoría de los gritos y ovaciones, a los que la Heredera respondió con su habitual simpatía.
La Casa de Bernadotte se estableció en Suecia en 1810 y fue fundada por Jean Baptiste Bernadotte, mariscal de Napoleón y que fue escogido como sucesor del último Rey de la dinastía Holstein-Gottorp, Carlos XIII, que murió sin descendencia. El mariscal francés fue coronado en 1818 como Carlos XIV Juan de Suecia y Carlos III de Noruega.