La noticia de su compromiso con Magdalena de Suecia fue anunciada por la Casa Real sueca el pasado mes de agosto y ahora, Jonas Bergström ha debutado en su primer acto oficial, acompañado por su prometida y la madre de esta, la reina Silvia, en Nueva York. La pareja fue sin duda el centro de atención en la gala benéfica del décimo aniversario de la Fundación Mundial de la Infancia (WCF), una organización creada por la Soberana sueca.
Con un brazalete de la WCF y una gran sonrisa, Jonas llegó al Club Harvard, escenario de la gala, acompañando a sus futuras suegra y esposa, que brilló con luz propia como una princesa de cuento, con un vestido azul palabra de honor.
A la gala asistieron entre otras personas Noor de Jordania y la estrella de hockey sobre hielo sueca Henrik Lundqvist. La reina Silvia pronunció un discurso durante el acto, en el que fueron entregados dos premios por sus contribuciones en beneficio de la infancia a las empresarias suecas Antonia Ax:son Johnson y Gunilla von Arbin.
El precio de la entrada para la gala costaba unos 17.000 euros y la recaudación en taquilla como las distintas donaciones hechas a lo largo de la noche fueron destinadas a la WCF. Horas antes la reina y Magdalena, acompañados por directivos y representantes de la organización, habían acudido a la sede de la ONU para celebrar el décimo aniversario de la WCF, que ella creó para impulsar el respeto de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
Los actos de ayer fueron la culminación para Magdalena de una estancia de un mes en Estados Unidos, trabajando en distintos proyectos de la organización, asistiendo a seminarios y realizando visitas de estudios. En los últimos años la hija pequeña de Carlos Gustavo y Silvia ha incrementado progresivamente su compromiso con la WCF, con la que ahora trabaja de forma activa.