Haakon y Mette-Marit de Noruega: cuando el protocolo cede el paso a la emoción
Los Herederos insuflan aires nuevos a la tradicional monarquía noruega
Hay momentos para todo: para seguir la etiqueta y para saltársela a la torera. Haakon y Mette-Marit de Noruega son de esos Príncipes herederos que saben adaptarse siempre a las circunstancias y a las necesidades de cada acto oficial. Exija lo que exija: llevarse al perro, vestir con llamativas deportivas y sin corbata para mostrar la cara más cercana de uno o, como en su último compromiso, dejarse llevar también por los sentimientos.
El protocolo cedió a la emoción cuando los príncipes Haakon y Mette-Marit asistieron al estreno en Oslo de la segunda temporada de una serie de documentales sobre jóvenes de origen extranjero que han tenido éxito en la sociedad noruega. Nuevos ejemplos es un proyecto de la organización juvenil VIBRO, que cuenta con apoyo económico del fondo de los Príncipes herederos. Fue la propia princesa Mette-Marit, quien ya había acudido hace un año al lanzamiento de la primera temporada, la que se encargó de presentar entre sonrisas el documental en un acto celebrado en el Parkteater de Oslo. Tanto el príncipe Haakon como la princesa Mette-Marit volvieron a demostrar otra vez que sienten muy suya la causa y no pudieron evitar derramar algunas lágrimas durante el visionado de algunas de las historias más conmovedoras.
No es el único ejemplo de los aires nuevos que soplan en la tradicional monarquía noruega. La princesa Mette-Marit visitó el viernes el centro para enfermos mentales de Solgården, en el municipio de Asker (el mismo donde residen los príncipes y su familia). El objetivo de la visita era conocer de primera mano un proyecto de la Cruz Roja bautizado Amigo de visita con perro, una oferta para favorecer el contacto de los internos con otras personas. Y, para dar ejemplo, la princesa Mette-Marit, protectora de la Cruz Roja desde 2005, se llevó a Muffin, el perro de la familia. La Princesa recorrió el centro con sus responsables y con el director de la Cruz Roja, y tuvo la oportunidad de charlar con uno de los enfermos. Son sus formas reales como Herederos y también como familia. Cuando el príncipe Haakon participó el fin de semana en un concurso de esquí, la princesa Mette-Marit y su hija, la princesa Ingrid Alexandra, le animaban con una entusiasta pancarta: "¡Hurra por el mejor papá del mundo!".