Como manda la tradición, la primogénita de los príncipes Haakon y Mette-Marit de Noruega, la princesa Ingrid Alejandra, futura Reina del frío país escandinavo, recibirá las aguas bautismales, el próximo 17 de abril, en la Capilla del Palacio Real, arropada por representantes de la mayoría de las Casas Reales.
El príncipe [Felipe de Borbón] será uno de los seis padrinos de bautismo de la pequeña Princesa, junto al rey Harald, el [príncipe Federico] de Dinamarca, la [princesa Victoria] de Suecia, la princesa Marta Luisa de Noruega y la madre de la [princesa Mette-Marit], Marit Tjessem. Muestra, una vez más, de la buena amistad que une al Príncipe de Asturias con el príncipe Haakon.
No obstante, al igual que el príncipe Federico, el príncipe Felipe no podrá asistir a la ceremonia bautismal por razones de agenda. Aunque ha aceptado encantado el honor de apadrinar a la pequeña. Quien sí asistirá, pese a las primeras dudas por su delicado estado de salud, será el rey Harald, que se ha reincorporado hoy mismo a sus tareas como monarca reinante tras haber estado de [baja por enfermedad] cuatro meses -desde diciembre-. La lista completa de invitados al bautizo la hará pública la Casa Real noruega el próximo jueves. No obstante, se sabe por el momento que un total de 300 asistentes acudirán a la capilla el próximo sábado por la mañana, de los que 225 almorzarán en Palacio tras la ceremonia, oficiada por el obispo de Oslo Gunnar Stålsett.
Gran celebración
El vestido que lucirá la princesa Ingrid Alejandra seguramente sea el mismo que han llevado todos los sucesores del rey Olav. Un precioso traje de cristianar diseñado por la princesa Ingeborg, la madre de la princesa Marta, que lleva bordados los nombres de todos los niños que con él se han bautizado.
La ceremonia tendrá un carácter mucho más oficioso y formal que la que tuvo lugar hace nueve meses con ocasión del bautizo de Maud Angélica. Al tratarse de una Heredera del trono, los varones de la Casa Real llevarán traje de gala. Asimismo, la celebración también será diferente. Mientras para el bautizo de Maud Angélica se organizó un almuerzo en las dependencias privadas de Palacio, que reunió a la familia más cercana y los padrinos de la pequeña, en esta ocasión se preparará una recepción en Palacio mucho más ambiciosa -un almuerzo-, con mayor número de invitados.