Maud Angélica, la única nieta de los Reyes de Noruega, fue presentada en sociedad el pasado fin de semana, seis meses después de su nacimiento, durante un concurso hípico internacional celebrado en el centro Spektrum de Oslo.
La princesa Marta Luisa, que hacía justo un año había conseguido el título de campeona de Saltos de Noruega en este mismo lugar, pensó que no había una ocasión mejor para que su hija fuera presentada a sus conciudadanos.
Así, la pequeña, que sólo había podido ser fotografiada con motivo de su nacimiento, el pasado 29 de abril, y de su bautizo, celebrado el 2 de julio en una ceremonia familiar, "eligió" reaparecer socialmente durante el concurso de saltos Rikstoto Grand Prix en el que el francés Bruno Broucqsau se erigió como campeón después de competir con los principales jinetes de Europa.
Derechos hereditarios al trono
La pequeña Maud Angélica, sentada en las rodillas de su orgulloso papá, estaba muy despierta y parecía tan interesada en los caballos como su madre, la princesa Marta Luisa, quien en 1991 acudió por primera vez a este concurso como participante... Y si en aquella ocasión, el rey Harald y el príncipe Haakon estuvieron en la tribuna quién sabe si, dentro de algunos años, no será la propia Marta Luisa la que ocupe orgullosa la primera fila del hipódromo para ver participar a Maud Angélica, quien a sus seis meses es, el vivo retrato de ella cuando era pequeña.
Maud Angelica, bautizada con estos dos nombres en honor a la reina Maud, esposa de Haakon VII, abuela del rey Harald y bisabuela de la Princesa, no tiene título real por decisión del rey Harald, pero sí derechos hereditarios al trono, tal y como dicta el párrafo 6 de la Constitución noruega.