De Mónaco al lago Maggiore, así imaginamos la boda de Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo
La continuación del cuento de hadas que inició Raniero de Mónaco y la princesa Grace en 1956 en menos de un mes escribirá un nuevo capítulo en su historia. Los protagonistas serán Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo, que celebrarán una boda en dos tiempos: primero un enlace civil en el Principado y después una ceremonia religiosa en lago Maggiore en Italia, tierra de la novia y del fallecido Stefano Casiraghi. Así imaginamos que se van a fusionar el glamour monegasco con la dolce vita italiana en dos de los eventos protagonistas del 2015.
25 de julio, un “sí, quiero” civil en el legendario Palacio de los Grimaldi
Todo apunta a que la discreción, la privacidad y el misterio serán grandes protagonistas en la mañana del 25 de julio, fecha que maneja Monaco Matin, cuando Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo se den su primer “sí, quiero”. Sin embargo, como ocurrió en la boda de Andrea Casiraghi, eso no evitará que los movimientos de los novios y sus invitados, traspasen los muros del Palacio Grimaldi, tanto el día del enlace como en los días previos, en los que cabe esperar que haya celebraciones para que los novios despidan su soltería.
¿Es esta la invitación de boda de Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo?
Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo, eligiendo escenarios para una boda de ensueño
Es previsible que en la mañana de la boda el movimiento comience en los hoteles de lujo, en los que se alojarán los amigos y familiares durante sus días en el Principado. Según la publicación italiana Dagospia, Paola Marzotto, madre de Beatrice, ha organizado un desayuno para sus amigos más íntimos en la terraza del lujoso Hotel Fairmont, en Montecarlo. Así que allí se podría dar cita la familia Marzotto con la condesa Marta a la cabeza, la abuela de la novia de Pierre, que contó recientemente a la revista ¡HOLA! que Beatrice es “su ojito derecho”.
Antes de comenzar la ceremonia, los alrededores del Palacio se convertirán en un auténtico desfile de coches de lujo y –aunque no se espera representantes de otras Casas Reales, sólo el príncipe Antonius von Fürstenberg, marido de Matilde Borromeo, hermana de Beatrice- de ellos descenderán importantes personalidades del mundo empresarial, de la política y de la cultura, amigos y familiares de la pareja.
Viendo la pasión que tienen los Casiraghi por los coches de época, los novios podrían elegir un original vehículo de su colección para llegar a la boda civil. ¿El muy retro Fiat 600 pick up que acaba de regalar Pierre a Beatrice con motivo de la boda o el Fiat blanco descapotable, tan romántico como vintage, con el que han circulado por Mónaco en varias ocasiones? A su boda Andrea Casiraghi llegó en un “jeep” militar antiguo y fue Pierre el que hizo de conductor, ¿volveremos a ver a los hermanos juntos?
Nos imaginamos que la ceremonia civil tendrá lugar en el salón del Trono, el mismo lugar en el que contrajeron matrimonio el príncipe Raniero y Gracia (1956), la princesa Carolina y Stefano Casiraghi (1983), el príncipe Alberto y Charlene (2011) y, según publicó la prensa monegasca, Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo (2013).
Será el repique de las campanas lo que indiquen a aquellos que se encuentren apostados en la plaza del Palacio, que Pierre y Beatrice ya son marido y mujer. Llegados a este punto, y si siguen las pautas marcadas por la tradición, los novios podrían descender por la impresionante escalinata de mármol de Carrara -presidida por el escudo de los Grimaldi, «Deo Juvante» (con la ayuda de Dios)- para recibir los aplausos y vítores de los invitados, un jolgorio que tradicionalmente traspasa los muros del Palacio.
Un brindis en los jardines que rodean a la piscina, sería una forma perfecta para festejar el enlace. El impresionante parque, construido por Florestán I, fue el lugar en el que el príncipe Raniero y la princesa Gracia fueron fotografiados por primera vez. Con ellos comenzó el cuento de hadas y Pierre y Beatrice son los novios idóneos para recoger su testigo.
1 de agosto, la boda de ensueño en las Islas Borromeas
Una semana después será el escondite italiano de la familia Borromeo el que acoja la gran ceremonia religiosa. Las Islas Borromeas -que emergen del lago Maggiore, a 89 kilómetros de Milán, un enclave alpino que discurre entre el norte de Italia y Suiza- se convertirán en el escenario para sellar su amor.
El lago Maggiore, el escondite italiano de Beatrice Borromeo
¿Quién es quién en la familia de Beatrice Borromeo?
Pierre y Beatrice tienen en donde escoger: Rocca d'Angera, uno de los escenarios de la boda de Isabella Borromeo y Ugo Brachetti Peretti; Isla Madre, el mágico lugar en el que Lavinia Borromeo y John Elkann se dieron el “sí, quiero”; Isla Bella, el paraíso soñado por Matilde Borromeo y el príncipe Antonius Von Fürstenberg diseñada como un barco emergiendo de las aguas, o quizá opten por sorprender a sus invitados con una nueva localización.
En ese sentido, Verbanonews, sitúa en enlace en el islote de San Giovanni, la única que no está abierta para turistas -ya que las otras se pueden visitar de marzo a octubre-, que se encuentra a menos de 150 metros de la orilla de Pallanza y que está bien protegida por una espesa vegetación. Aún con todo el citado medio especula con la posibilidad de que se cierre el tránsito de la calle Vittorio Veneto, que circula paralela al lago para así evitar miradas indiscretas. Esa ubicación tiene otro punto a su favor, puesto que muy cerca se encuentra el Grand Hotel Majestic de Pallanza, el lugar donde según el medio se podrían quedar muchos de invitados. El exclusivo alojamiento cuenta con bellos jardines y un playa privada con embarcadero propio, justo en frente de la isla de los Borromeo, lo que convierte este hotel en el enclave perfecto para llegar a San Giovanni.
¡Y por fin habrá llegado el gran día! Nos imaginamos a los invitados -entre los que se podrían encontrar algunas de las familias más relevantes del país a nivel empresarial, político y cultural como los Angelli, los Elkan o los Missoni - desfilando en embarcaciones rumbo al pintoresco "isolino". Amigos, compañeros de la Universidad Luigi Bocconi de Milán en la que se conocieron los novios en el año 2008 y las familias Grimaldi, Casiraghi, Borromeo y Marzotto al completo, todos deseando (Pierre incluido) que la bella Beatrice haga su entrada vestida de blanco, suponemos que podría ir precedida por Sasha Casiraghi y por alguno de sus sobrinos, que ejercerían diligentes como damitas y pajes.
Los Borromeo se hacen con el Baile de la Rosa
Los invitados a la boda de Matilde Borromeo y el príncipe Antonius von Furstenberg
En ese momento se desvelará el secreto mejor guardado de una novia: el vestido. Entre los nombres que se barajan, suenan con fuerza los de los grandes diseñadores italianos, algunos de ellos auténticos expertos en vestir a las novias más distinguidas de la realeza. “No ha sido necesario dar ningún consejo a Beatrice sobre su traje de novia. De todas formas, me gustan las sorpresas”, contó su abuela Marta a la revista ¡HOLA!, así que el misterio está servido, igual que con el aderezo de joyas. Su hermana Matilde llevó en su boda una majestuosa tiara de diamantes pertenecientes a la familia del príncipe Antonius von Fürstenberg, mientras que Tatiana Santo Domingo escogió la tiara Fringe de brillantes de la princesa Carolina. ¿Abrirá Beatrice el joyero principesco para rememorar a la princesa Grace?
Entre los nombres que menciona el citado medio de Verbano –que celebra la publicidad que la boda dará a su turística región- para oficiar la ceremonia está el del párroco Don Giuseppe Volpato. Como en un cuento de hadas Beatrice y Pierre se podrían dar el “sí, quiero” ante él, con el sol reflejándose en el segundo lago más grande de Italia y rodeados por las imponentes montañas de la Lombardía, el Piamonte y Suiza.
Si la ceremonia nos la imaginamos al aire libre, en los jardines diseñados con mimo -repletos de olivares, cítricos, magnolias o camelias-, donde también se podría beber la primera copa de champán en honor a los recién casados, el banquete nupcial podría ocupar el interior del palacio, que fue modificado durante la primera mitad del siglo XIX y que desde entonces luce su aspecto actual.
¿Quién confeccionará el menú? ¿Será servido por Daturi e Motta? Este catering fundado en Turín -con sede en Como y en Milán-, está considerado el mejor del país por el portal italiano sobre estilo de vida Classlife y fueron los que se encargaron de desplazarse hasta el lago Maggiore para la boda de Matilde Borromeo y Antonius von Fürstenberg, además de estar presentes en numerosas veladas VIP de la sociedad italiana.
Llegados a este punto… ¡Que comience la música y a bailar hasta el amanecer! Pierre Casiraghi ha demostrado, en más de una ocasión durante el Baile de la Rosa, ser todo un Fred Astaire y disfrutar bailando con Beatrice entre sus brazos. Así que la noche prometerá y mucho… ¡Qué vivan los novios!