La película Grace de Mónaco, una obra del director francés Oliver Dahan que retrata el momento en que Grace Kelly abandona el cine para casarse con Rainiero de Mónaco, abrirá el próximo 14 de mayo el Festival de Cannes fuera de competición. Al estar protagonizado por la australiana Nicole Kidman se trata de un filme muy esperado que, sin embargo, no cuenta con la aprobación de la familia Grimaldi, que ha emitido un comunicado asegurando que está basada "en referencias históricas erróneas y literarias dudosas".
"El fantasioso tráiler confirma el carácter totalmente ficticio de esta película. Esto refuerza la convicción extraída de la lectura del guión de que se trata de una producción, una página de la historia del Principado, basada en referencias históricas erróneas y literarias dudosas", denuncian los tres hijos de la princesa Gracia. El comunicado, enviado por el gabinete de Alberto de Mónaco, insiste en que este largometraje "no puede en ningún caso ser calificado de biopic".
Asimismo, recuerda que el director y los productores rechazaron tomar en consideración "las numerosas observaciones formuladas por el Palacio, que habrían provocado el cuestionamiento global del guión y de los personajes". La familia monegasca, por todo ello, afirma que "no desea de ningún modo estar relacionada con una película que no refleja la realidad", y lamenta que su historia "haya sido objeto de una tergiversación con fines puramente comerciales".
El príncipe Alberto y sus hermanas, Carolina y Estefanía, ya habían cargado contra el filme en enero de 2013, fecha en que afirmaron que "relata una página de la historia del principado y de su familia, reescrita e inúltimente glamourizada", que contiene "importantes inexactitudes históricas y una serie de escenas puramente ficticias". Añadían que "el Palacio no puede admitir que la producción de esa película deje entender actualmente, por razones comerciales, que sus altezas la avalan de alguna manera, porque no es el caso", algo que han reafirmado con el comunicado.