Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo se casan en unas semanas, el próximo 31 de agosto. Era una boda anunciada: llevaban un año oficialmente comprometidos y ocho años de relación. Las imágenes de este verano de la pareja, a bordo del impresionante yate Pachá III y con el amor a toda vela, más enamorados y felices que nunca, disfrutando con un grupo de amigos de su primer estío como padres por aguas monegascas, no dejaban lugar a dudas de la proximidad de un enlace que, varios meses después del nacimiento de Sacha, todo el mundo esperaba con impaciencia. Hasta el pasado Baile de la Cruz Roja.
La nueva edición de la emblemática gala monegasca prometía como siempre belleza, elegancia y femineidad de las damas Grimaldi, pero además la prensa tenía como aliciente añadido indagar sobre las buenas nuevas de los hermanos Casiraghi. Dicen que Carolina de Mónaco, radiante de Chanel, contenta y relajada, no escondió su felicidad como joven abuela y que tampoco ocultó que no tardará mucho en repetir de esas mieles porque su hija, Carlota Casiraghi, esperaba un acontecimiento muy feliz para finales de año... Y que, como las alegrías vienen todas juntas, había otra más en camino: el enlace de Andrea y Tatiana el próximo 31 de agosto en Mónaco.
No hay más detalles por el momento aparte de la fecha -31 de agosto- y no habrá comunicado, según ha podido confirmar hola.com. Lo que se da por descontado es que al enlace no faltará como invitado el glamour, garantizado por las damas Grimaldi, pero también por las amigas de la novia Eugenie Niarchos, Coco Brandolini, Margherita Missoni y Gaia Repossi. Todo lo demás (el lugar, el tipo de ceremonia...) son conjeturas. Y en la danza del rumor unos apuntan que, a pesar de no tener título, debido a su posición y a la falta de descendencia legítima del príncipe Alberto, Andrea Casiraghi, que es actualmente segundo en la línea de sucesión al trono de Mónaco, detrás de su madre, podría contraer matrimonio en una boda en palacio. Otros sostienen que los novios vivirán el día más feliz de su vida a su gusto y que la pareja querría celebrar su matrimonio en estricta intimidad y, días después, reunir en una gran fiesta a todos sus invitados en Mónaco, pero oficialmente no hay nada en firme. Una vez convertidos en marido y mujer, Sacha será incluido en la línea de sucesión al trono monegasco después de su padre, que es segundo heredero a la Corona.
Ocho años de amor
Andrea Casiraghi, hijo mayor de la princesa Carolina y Stefano Casiraghi, conoció a su prometida a través de su hermana, Carlota Casiraghi, después de que las dos jóvenes entablaran amistad al coincidir en la misma escuela, Lycée Jeanne d'Arc Saint-Aspais, de Fontainebleau, cerca de París, ciudad en la que residen. Iniciaron su romance dos años después, mientras ambos estudiaban en la Universidad Americana de la capital francesa. Andrea pertenece junto a sus hermanos, Carlota y Pierre Casiraghi, a un exclusivo grupo de jóvenes estilosos aristócratas bendecidos genéticamente. Fue elegido en 2002 uno de los 50 hombres más atractivos por la revista People. La buena fortuna de su genética proviene de su abuela, la estrella de cine de Hollywood Grace Kelly, que llegó a ser uno de las Princesas más icónicas de todos los tiempos. Pero también heredó carácter y estilo de su padre, Stefano Casiraghi, un empresario italiano que estuvo casado con Carolina de Mónaco hasta su muerte a los 30 años en un fatídico accidente motonáutico durante el Campeonato del Mundo de offshore, disputado en aguas del Principado.
Tatiana Santo Domingo, nieta del industrial colombiano Julio Mario Santo Domingo, cuya fortuna se estima en más de 6.000 millones de dólares (cerca de los 5.000 millones de euros), tampoco tiene nada que envidiar. Como su prometido, también es mujer de mundo -estudió en Ginebra, París, Londres y Nueva York- y tiene espíritu bohemio. Ahora se ha lanzado a la aventura empresarial de la mano de su amiga Dana Alikhani, con quien fundó en 2009 la marca Muzungu Sisters, casa de moda dedicada a las prendas artesanales bajo el sello de comercio justo y que propone un look de corte hippy renovado. Ya no queda nada para asistir a una nueva Boda Real en Mónaco.