Paulina Ducruet encandila en una nueva cita benéfica contra el sida junto a Estefanía de Mónaco

El único hijo de la Princesa acompañó con orgullo a su madre y su hermana

Por hola.com

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Ni la belleza, ni el glamour, ni la solidaridad Grimaldi han abandonado Mónaco por vacaciones. La princesa Estefanía y sus hijos mayores Luis y Paulina Ducruet, ausentes habituales de las citas sociales, garantizaron la mejor imagen del pequeño principado en una nueva velada benéfica. Apenas unos días después del gran Baile de la Cruz Roja, el Sporting Club de Montecarlo volvió a albergar la gala anual Fightaids para recaudar fondos para la lucha contra el sida.

La princesa Estefanía, que presidió la ceremonia muy bien acompañada por sus chicos mayores –faltaba su hija Camille Gottlieb, de 15 años, fruto de la relación de la Princesa con su guardaespaldas Jean-Raymond Gottlieb-, volvió a presumir de buenos hijos: de su dulzura, de su belleza, de su humanidad. Y es que, como aseguró hace un tiempo, la Princesa les ha inculcado "buenos valores" y uno de ellos es la solidaridad con aquellos que padecen esta enfermedad. Causa por la que Luis y Paulina Ducruet, de 20 y 19 años respectivamente, interrumpen por norma su retiro público.

La velada -más informal que los emblemáticos Bailes de la Rosa y de la Cruz Roja- compensó la espera a los admiradores de Paulina, la bella, digna sucesora de su abuela, la princesa Grace, y junto con su prima Carlota, representante de la nueva generación del glamour Grimaldi, con una nueva aparición en la que desplegó como siempre encanto y elegancia. No se quedó atrás la princesa Estefanía, que presumió de bronceado y piernas esculturales con una minifalda. Madre e hijos vistieron de punta en blanco… y negro.  No faltó a la gala de anoche una exquisita cena, de 170 euros el cubierto, seguida de un concierto del cantante canadiense francófono Garou y una rifa. Todos los ingredientes para una noche redonda.

La Asociación de la Lucha contra el Sida de Mónaco nació hace nueve años bajo la iniciativa de la princesa Estefanía, presidenta activa, y cuenta con el respaldo de su hermano, el príncipe Alberto, que fue nombrado Presidente de Honor. La causa más personal de la Princesa aporta apoyo directo a aquellas personas seropositivas del principado, a través de diversas actividades como son el diálogo con los pacientes, la organización de convivencias, comidas o entretenimientos como el yoga o la informática. Cada año los objetivos son cada vez más ambiciosos y la necesidad de recursos es también mayor. Ya son Estefania de Mónaco y sus hijos mayores, Luis y Paulina Ducruet, al frente: todos contra el sida.

 

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