Día Nacional de Mónaco: puro 'glamour' Grimaldi
Hans Adam de Liechtenstein se unió a la Familia Principesca, como su invitado de honor, en los actos conmemorativos
Los Grimaldi se han reunido un año más para celebrar el Día Nacional del Principado. Alberto II, que vive hoy su octava festividad nacional como soberano, ha vuelto a congregar a la familia como siempre fue el deseo de su antecesor, el príncipe Raniero, y ha festejado la gran ocasión acompañado por su esposa, que asistía a su segunda Fiesta Nacional como Princesa de Mónaco; sus hermanas, las princesas Carolina y Estefanía, y sus sobrinos Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi. Los principales miembros de la Familia Principesca juntos (la prometida de Andrea Casiraghi, que dio a conocer en nuestro país su embarazo, tampoco ha asistido en esta ocasión a la celebración del día grande del Principado) y uno más: su invitado de honor Hans Adam de Liechtenstein, que excepcionalmente se ha sumado a los actos conmemorativos, una misa de acción de gracias en la catedral monegasca y el tradicional saludo desde balcón principal del palacio Grimaldi ante los miles de ciudadanos monegascos.
El glamour se hizo Grimaldi
El Principado de Mónaco continúa siendo en cada cita referente de Glamour con mayúscula. Como no podía ser de otra manera, esta ocasión tan especial no ha sido la excepción y las damas Grimaldi volvieron a hacer alarde de su elegancia: la princesa Charlene, fiel a su estilo, lució un abrigo azul marino de líneas sencillas, corte evasée y plisado lateral en la cintura, que combinó con un pequeño bombín con redecilla, guantes y zapatos a tono; la princesa Carolina vistió un traje de chaqueta y falda de tweed en tonos negro, blanco y rosa con adorno de gasa en mangas y en la cadera y, como complementos, un tocado negro con redecilla, guantes grises y zapatos negros; la princesa Estefanía, que se recogió el pelo en un moño, optó por un abrigo-vestido blanco con jaspeado y ribetes a lo largo de la botonadura en negro y uñas a tono, y Carlota Casiraghi, que reinó con un vestido bicolor (la parte superior azul marino y la falda negra), a tono con la chaqueta y el sombrero, dio el toque de color con uñas rojas.
Los caballeros no se quedaron atrás en distinción. El príncipe Alberto vistió un traje militar de gala, mientras que sus sobrinos Andrea y Pierre Casiraghi se decantaron por el chaqué. El hijo mayor de la princesa Carolina lo combinó con chaleco gris y corbata azul, y el pequeño, con chaleco gris y corbata lila. Ni el Día Nacional ni el derroche de elegancia durante el mismo terminan tras la emotiva misa de acción de gracias en la catedral monegasca y el tradicional saludo desde el balcón de palacio. Habrá un nuevo desfile de glamour por la noche. Los festejos culminarán en la ópera de Montecarlo, con la Familia Principesca monegasca vestida de largo, y un castillo de fuegos artificiales en el puerto.