Los rumores de crisis vuelven a planear sobre Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock. Durante los últimos meses, la pareja se ha dejado ver en público en contadas ocasiones, la última de ellas fue hace un mes en el Festival Internacional de Circo de Montecarlo y la anterior, antes de finalizar el año, en el tradicional y gélido baño navideño organizado por la Asociación TATSA, a favor de las víctimas del Tsunami de 2004.
Ahora Alberto II ha vuelto a asistir a un actor sin la compañía de Charlene, la inauguración de la Feria de Nuevas Tecnologías de Montecarlo, donde tuvo la oportunidad de disfrutar por un día de la vida en visión 3D y se mostró relajado y ajeno a todo lo que se está diciendo estas semanas sobre su relación con la nadadora.
Ahora la revista Point de Vue apunta a que el Soberano monegasco y la nadadora sudafricana están atravesando una “etapa de distanciamiento”. Se habla de “crisis”, “tensiones” y “problemas” y al parecer, el que ahora se encuentren cerca de Mónaco Alexandre, el hijo que tuvo Alberto con la ex azafata de vuelo Nicole Costa, agudizan más esta situación.
Fuentes cercanas a la pareja han contado a la publicación francesa que Charlene ya no reside en el Palacio Grimaldi, -vivía en las habitaciones que pertenecieron a la princesa Estefanía- , sino que se encuentra “un poco más lejos”.
Y mientras tanto, los ciudadanos monegascos siguen esperando la próxima aparición de la pareja para que poner fin a estos rumores y, sobre todo, ansían la noticia de una boda real.