Carlota Casiraghi y Alex Dellal descubren juntos la magia de la noche veneciana

Viajan con frecuencia a los destinos más lejanos y exclusivos del planeta. Sin embargo, esta vez, Carlota Casiraghi y su novio, Alex Dellal se han dejado seducir por los encantos de una ciudad no muy alejada de su adorado Principado, Venecia. La pareja llegó a la ciudad de los canales dispuesta a disfrutar de unos días inolvidables llenos de arte, cultura y moda.

No quisieron perderse la inauguración del segundo centro artístico auspiciado por el magnate François Pinault. La cita reunió a numerosos rostros conocidos, como el hijo de este nuevo mecenas, François-Henri Pinault, Naomi Campbell, Jacques Chirac y Adriana Abascal, entre otros, en la Punta della Dogana, una de las vistas más fotografiadas de Venecia.

Pero Carlota y Alex no sólo disfrutaron de los eventos culturales que estan teniendo lugar en la 53ª edición de la Bienal del Arte, también acudieron a una de las fiestas más glamourosas de la temporada, organizada por la diseñadora Margherita Missoni a bordo de un lujoso barco.

Se convirtieron, sin duda, en la pareja de la noche. Carlota estaba deslumbrante con un vestido negro de la firma italiana y su melena suelta. Además, prescindió de las altísimas sandalias negras que lució durante la tarde para pasear descalza y disfrutar, cómodamente, de la cena que se sirvió en la embarcación.

La hija de Carolina de Mónaco se encontró, en una velada dedicada a la moda, con una de sus mejores amigas, Eugene Niarchos, que suele ser otra de las habituales en los desfiles de los mejores modistos y en las reuniones a las que acuden los hermanos Casiraghi.

No obstante, Carlota no sólo ha tenido tiempo estos días para actos sociales y románticos momentos con su novio. También salió por las mañanas a pasear junto a un grupo de amigas por las calles de Venecia. Con un cómodo, aunque estiloso, atuendo se dejó ver por los rincones con más encanto de la ciudad de los canales. E incluso adquirió algunos productos de los variadísimos puestos que suelen atraer la atención de cualquier buen turista.