Los Grandes Duques de Luxemburgo visitaron la localidad de Larochette, donde asistieron un festival popular organizado por los ciudadanos.
El pueblo de Lachorette salió en masa para saludar y felicitar a sus Grandes Duques que correspondieron a su pueblo con sonrisas y otras muestras de cariño.
Como cada Día Nacional, los Grandes Duques de Luxemburgo se estrecharon en un abrazo con su gente.
El programa de los Grandes Duques de Luxemburgo en la localidad de Larochette incluía visitas a centros médicos, residencias de ancianos y empresas de gran tradición.
Luxemburgo sale a las calles para festejar el día más importante de su calendario.
El programa de los Grandes Duques de Luxemburgo en la localidad de Larochette incluía visitas a centros médicos, residencias de ancianos y empresas de gran tradición.
Los Grandes Duques de Luxemburgo crean a su alrededor un ambiente distendido.
La gran duquesa María Teresa se decantó por el clásico binomio blanco y negro: optó por un cómodo atuendo de camiseta y pantalón, que combinó con un elegante sobretodo de estampado floral.
Luxemburgo era una fiesta.
El gran duque Enrique firmando en el Libro de Honor de la localidad de Larochette.
La princesa Claire, la más audaz de las princesas de Luxemburgo, acompañó su conjunto de blusa y pantalón con stilettos un toque atrevido in rouge en los labios y la melena suelta.
Una de las muchas miradas enamoradas de los príncipes Félix y Claire durante las celebraciones del Día Nacional de Luxemburgo.
La Familia Gran Ducal se vistió de tiros cortos para acudir a una misa Te Deum en la Catedral de Luxemburgo.
La alfombra roja que conducía al templo se convirtió en una pasarela de elegancia.
Las damas reales se conjuntaron en tonos pastel: la Gran Duquesa de Luxemburgo lució para la ocasión un traje de color lila que coronó con una exquisita pamela.
La princesa Stéphanie vivió un Día Nacional especialmente emotivo y se despidió de los luxemburgueses con un hasta luego, ya que el próximo mes de septiembre partirán hacia Londres para proseguir sus estudios.
La princesa Claire repitió el romántico vestido de la firma Vilshenko que lució en el Día Nacional de hace dos años, esta vez lo coronó con un adorno de flor en un tono más subido que la primera vez.
La Familia Gran Ducal durante el servicio de acción de gracias Te Deum.
La Familia Gran Ducal hizo su puesta de largo para celebrar la esperada recepción en Palacio, a la que como siempre acudió lo más granado de la sociedad luxemburguesa.
La princesa Stéphanie vistió de tirantes y turquesas la primera gala del verano en palacio.
La princesa Claire, la más influencer de las princesas de Luxemburgo, lució el escote Meghan de su vestido de novia y la tiara de hojas de laurel y zafiro.
La princesa Alejandra se zambulló igualmente en las profundidades de la nueva temporada con un vestido coral y turquesa, que conjuntó con una tiara de aguamarinas.
No importa donde residan el resto del año, pero los hijos de los Grandes Duques de Luxemburgo vuelven a casa en el Día Nacional.