Se podría decir que son los herederos más “desconocidos” de las Monarquías europeas. Guillermo y Stéphanie de Luxemburgo llevan una vida discreta y cumplen con sus obligaciones oficiales como herederos del Gran Ducado y, aunque es frecuente verles en su esfera pública, son pocas las ocasiones en las que se puede echar una mirada a su faceta más privada.
Son jóvenes y están enamorados de eso no cabe duda al mirar las instantáneas. Y es que en las nuevas fotografías oficiales que ha difundido la Casa Ducal de la pareja, las miradas y las sonrisas dicen mucho más que cualquier palabra.
Guillermo y Stéphanie aparecen en diversos escenarios, dentro de palacio y en los jardines, y con diferentes atuendos, ya que la Heredera está en algunas fotos vestida casi de noche.
Los gestos espontáneos, la alegría que transmite esa risa no contenida de Guillermo, la mirada de amor que le dedica Stéphanie… son sin duda una muestra del lado más personal de los Herederos, ese que en las citas públicas se contiene. Ellos están llamados a tomar un día el relevo del trono y seguro que lo hacen con la misma naturalidad que demuestran ahora.