Su impresionante vestido de encaje pudo ser la razón por la que probablemente nadie reparara en una lesión de aspecto muy doloroso, que no le impidió sin embargo acudir a las nupcias junto a los demás miembros de la Familia Real británica.
Beatriz de York se puso unos elegantes stilettos de pulsera para celebrar el gran día de lady Gabriella, pese al hematoma de considerable tamaño que le cubría la parte interna del pie derecho y que se prolongaba hasta el tobillo.
Dicen que la felicidad es la mejor medicina y Beatriz de York lo corroboró en la boda real junto a su novio, Edoardo, con quien lleva saliendo desde el pasado noviembre.
Beatriz de York no quiso repetir experiencia y asistió con zapato plano a sus citas posteriores a la boda de lady Gabriella como en su visita al Chelsea Flower Show.
Beatriz de York acudió con calzado plano a la exhibición privada Animal Ball Art Show.
Su asistencia a la boda real de lady Gabriella era otro paso hacia adelante en su propio camino hacia el altar: tras haber recibido la bendición del príncipe Andrés y Sarah Ferguson, la princesa Beatriz presentaba oficialmente a su novio a Isabel de Inglaterra y otros miembros de la familia.