La mirada cómplice de los Duques de Cambridge en el desfile de la orden de la Jarretera
La duquesa Catherine dirigió una sonrisa al príncipe Guillermo, durante el espectacular desfile
Un año más, la Familia Real inglesa ha presidido la espectacular ceremonia de la Orden de la Jarretera, la orden de caballería más antigua del Reino Unido. Ataviados con capas de terciopelo y vistosos sombreros adornados con una pluma blanca, los miembros de la realeza desfilaron por el Castillo de Windsor. La reina Isabel, con las mejores galas tradicionales, presidió el desfile de las tropas de esta orden que fue fundada en 1348 por el rey Eduardo III.
El príncipe Guillermo, que se convirtió hace cinco años en el caballero número 1.000 por decisión de la soberana británica con el consejo del Gobierno, ha participado en el servicio religioso anual junto a los otros miembros de la Familia Real que también forman parte de la orden: la Reina, el Duque de Edimburgo, el Príncipe de Gales, la princesa Ana, y los príncipes Andrés y Eduardo. Durante el desfile, se pudo captar la complicidad que existe entre los Duques de Cambridge. Naturales y sin importarles los ojos indiscretos que les miraban, el príncipe Guillermo y su esposa cruzaron la mirada, justo cuando el Príncipe pasó por delante de las damas de la Familia Real. Una mirada que llevaba implícitos todo el amor y el orgullo que siente la Duquesa de Cambridge por su marido.
La ceremonia religiosa se ofició en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor, la sede de la mencionada orden, y como el resto de los caballeros el hijo mayor del príncipe Carlos ha vestido el atuendo que ya luciera su antepasado el rey Eduardo III: capa de terciopelo azul y vistoso sombrero de terciopelo negro adornado con una pluma blanca.
Mientras el príncipe Guillermo desfilaba junto a su padre, el príncipe Carlos, su esposa, la Duquesa de Cambridge, compartía un lugar destacado acompañando a la Condesa de Wessex. La Duquesa de Cornualles no pudo asistir al evento debido a un cuadro de sinusitis, según informó Clarence House.
La Duquesa de Cambridge continuó con la tradición de reciclar sus atuendos favoritos y usó un abrigo azul de Christopher Kane hecho a la medida, el mismo que llevó en la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Lució además un sombrero de Lock & Co en el mismo tono de su abrigo, mientras que la Condesa de Wessex se decantó por un vestido blanco de manga corta, una estola de piel y un sombrero en color rosa pálido. Las dos damas de la Familia Real observaron la procesión debajo de un toldo, pues el clima amenazaba con pasar de soleado a lluvioso, mientras cientos de espectadores observaban al grupo de Caballeros de la Orden de la Jarretera entrar a la capilla de San Jorge.
La Orden de la Jarretera honra a aquellos que han trabajado en el servicio público, que han contribuido a la vida nacional o han servido personalmente a la monarquía. Tras muchos años de elegir a sus miembros en base a una recomendación gubernamental, la Orden ha regresado a su función original, un signo de consideración entre la realeza. Sólo puede haber 24 caballeros a la vez, y este lunes se le rindió honores a dos nuevos miembros de la Orden: Mervin King, el ex gobernador del Banco de Inglaterra, y Eliza Manningham-Buller, ex cabeza del MI5.