Los Duques de Cambridge, en la boda de unos amigos en Suiza
Tras acudir junto al príncipe Harry al enlace de Mark Tomlinson y Laura Bechtolsheimer, disfrutaron de unas mini vacaciones de invierno en los Alpes suizos
La nieve y las bajas temperaturas de Arosa (Suiza) recibieron a los Duques de Cambridge y al príncipe Harry, que acudieron a la boda de sus amigos, Mark Tomlinson y Laura Bechtolsheimer, medallista olímpica en Doma (Hípica). Después de ver sus primeras instantáneas luciendo embarazo, Catherine eligió en esta ocasión un look en tonos marrones, en el que combinó un vestido estampado de MaxMara, con un abrigo color crema, cuello de piel, sombrero color chocolate y 'clutch' a juego. Y es que el frío no dio tregua y, por eso, todas las invitadas, los hombres fueron algo más 'valientes', recurrieron a ropa de abrigo, al igual que la novia, por lo que no pudimos ver su vestido a su llegada a la iglesia en un flamante coche de caballos.
No cabe duda de que la Duquesa está viviendo uno de los momentos más dulces de su vida y, por eso, durante la celebración no dejó de sonreír y de mostrarse simpática y cómplice con su marido y con su cuñado, el príncipe Harry. Además, Catherine tuvo varios gestos premamá y no dudó en acariciarse la tripa, un gesto más que habitual en las futuras mamás, sobre todo en las primerizas, que están deseando que llegue el día en el que puedan tener a su bebé entre sus brazos.
Las bajas temperaturas no impidieron que los invitados lanzaran confeti blanco al aire cuando los recién casados abandonaron la iglesia de Arosa, antes de dirigirse al banquete, que tuvo lugar en el Tschuggen Grand Hotel. Los Duques de Cambridge y el príncipe Harry, se reunieron así con muchos de sus amigos con los que compartieron un entrañable día. Es el caso de Rosie y Harry Meade, a cuya boda acudieron en octubre de 2010 cuando la Duquesa todavía era Kate Middleton, Guy Pelly, que fue uno de los organizadores de la despedida de soltero del príncipe Guillermo, o Thomas van Straubenzee y Lady Melissa Percy, entre otros muchos.
"Colgaré aquí las fotos oficiales de la boda para que todos podáis verlas, pero hasta entonces, podéis ver las que han publicado algunos medios", escribió Laura en su perfil personal de las redes sociales, donde también fue publicando sus impresiones las horas previas antes de su gran día: "Por fin he encontrado unos zapatos para la boda!! Hip hip hurra!! #pies fríos". "Empieza la cuenta atrás...", escribió, y añadió: "Tengo 28 años... casi estoy casada... ¿Qué está pasando en el mundo? Si hace unos minutos sólo tenía 18 años!!!".
Aprovechando el viaje, los Duques de Cambridge disfrutaron de unas mini vacaciones de invierno en los Alpes suizos, donde vimos a Catherine charlando animadamente con unos amigos mientras paseaba por las concurridas pistas de la conocida estación de esquí de Arosa. Vestida con ropa de abrigo y botas de nieve, la esposa del príncipe Guillermo estuvo muy atenta con el hijo de una pareja de amigos y no dudó en ayudar a la madre a llevar la bolsa con las cosas del bebé.