Vestido de manera informal con ropa veraniega, gafas de sol y un sombrero, el príncipe Harry consiguió pasar desapercibido en una fiesta en Las Vegas. ¿El motivo? No fue su indumentaria, sino la presencia de una impresionante Jennifer López, que con un conjunto blanco de Bec & Bridge, bolso de Hermes y cuñas con un tacón de infarto de Lanvin, acaparó todos los flashes en la celebración previa a su concierto que tuvo lugar en el exclusivo hotel MGM Grand. La diva se paseó por la piscina, tomó el sol, atendió a sus fans, se hizo fotos... algo que, sin duda, contribuyó a que el hijo de Carlos de Inglaterra pudiera disfrutar de la velada sin el acoso de los periodistas y fotógrafos.
"Hubo algunas chicas que le reconocieron y se acercaron a él, pero nada más. La verdad es que se portó como todo un caballero y charló brevemente con ellas, aunque no se interesó especialmente por ninguna", aseguró un testigo de lo ocurrido a la revista People.
La diversión y la fiesta estaban aseguradas. La piscina del hotel se convirtió en un verdadero hervidero en el que la multitud no dejaba de aplaudir y vitorear a la artista, que, como era de esperar, acudió junto a su inseparable novio, el bailarín Casper Smart. Mientras Jennifer 'alimentaba' a las masas, Harry aprovechó entonces para disfrutar con su grupo de amigos, tomar cócteles, bañarse en la piscina -con un bañador rojo de estampado floral- y jugar al fútbol. ¿Quién le iba a decir que lograría ir de incógnito gracias a la presencia de la cantante?
Y es que después de cumplir a la perfección con su papel como embajador en los Juegos Olímpicos de Londres, el hermano del príncipe Guillermo de Inglaterra no se lo pensó dos veces a la hora de cruzar el charco para disfrutar de unos merecidos días de descanso en Las Vegas, donde ya estuvo el pasado mes de noviembre llevando a cabo su entrenamiento militar.
I wanna dance, and love, and dance again... Este es el pegadizo estribillo de la canción Dance again de Jennifer López que, sin duda, se ha convertido en uno de los temas más bailados y escuchados durante este verano. ¿Habrá movido también las caderas el príncipe Harry al ritmo de su música?
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