Acostumbrados a verla rodeada de ‘glamour’ y miembros de la realeza europea o luciendo elegantes vestidos en bodas y otros eventos, muchos desconocen que la princesa Beatriz también ha invertido parte de su tiempo, durante los últimos años, a atender sus responsabilidades como estudiante universitaria, como tantos otros jóvenes de su edad. Y ese esfuerzo, finalmente, se ha visto recompensado este fin de semana en el acto de graduación.
La nieta de la reina de Inglaterra, que comenzó sus estudios de Historia del Arte hace tres años en la Universidad de Goldsmith, al sureste de Londres, ha asegurado que su etapa de estudiante universitaria ha sido "una experiencia increíble". Rodeada de otros 325 alumnos de la universidad y acompañada por sus padres, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson, la prima del príncipe Guillermo se colocó la toga y el clásico birrete negro para recibir el reconocimiento a sus años de estudios, ya finalizados.
El que no estuvo presente fue Dave Clark, novio de la princesa desde hace algunos años y con el que se la suele ver en la mayoría de sus salidas públicas. En relación a su futuro profesional a partir de ahora, la princesa, de 23 años y quinta en la línea de sucesión al trono, tiene pensado realizar prácticas y centrarse en su faceta más solidaria. La joven colabora con diferentes causas benéficas, entre ellas, con una asociación que ayuda a niños con dislexia, trastorno que le fue diagnósticado cuando era pequeña y que dificulta el proceso de aprendizaje de lectura y escritura. Su madre, Sarah Ferguson, hizo pública la enfermedad de su hija mayor en 2005 y afirmó que ella misma también había sufrido el mismo problema. Tras el diagnóstico, la princesa recibió ayuda profesional y, gracias a su optimismo y dedicación, hoy en día ha logrado todos sus objetivos.
La princesa siempre ha contado con el apoyo de sus padres y, por eso, éstos quisieron estar presentes en uno de los días más importantes en la vida de su hija. Orgullosos y sonrientes, pudimos verles demostrando a su hija su alegría colmándola de besos y abrazos. Pero no sólo lo manifestaron in situ ya que la ex mujer del duque de York utilizó su cuenta personal en una conocida red social para expresar su emoción: "Beatriz se gradúa hoy en Goldmisth. Estoy tan orgullosa de su logro. Como todos los padres y madres lo están, bien hecho... a todos los graduados".
Tras la celebración en la universidad, los tres se trasladaron a un conocido restaurante en el barrio de Myfair, situado en el distrito de Westminster, en la zona oeste de Londres. Allí pudimos ver el vestido que Beatriz eligió para la ocasión: un sencillo diseño negro de gasa con mangas abullonadas y botones, y un colgante plateado que contrastaba con la sobriedad del 'look'. Para completar su estilismo, la joven optó por unas cómodas bailarinas bicolor que también llevaba su madre tras haber lucido unos zapatos de tacón bajo durante la ceremonia.