Rodeados de ‘glamour’ y ‘celebrities’. Así ha terminado el viaje de tres días en California de los Duques de Cambridge. Como si de estrellas de cine se tratara, la pareja asistió a la cena ‘Brits to match 2011’, organizada por la Academia Británica de Cine y Televisión (BAFTA), y de la que el príncipe Guillermo es presidente desde 2010. El objetivo de esta gala es promocionar a nuevos talentos británicos en la meca del cine y promover su trabajo con directores y productores americanos.
Pero si uno de los dos se llevó aplausos y halagos a su llegada al teatro Belasco, situado en el centro de Los Ángeles, esa fue Catherine que, luciendo un vaporoso vestido de Alexander McQueen en un tono lavanda muy claro, unos pendientes prestados por la reina Isabel II y ‘clutch’ y sandalias de Jimmy Choo deslumbró, una vez más, por su sencillez y elegancia. Y es que si algo ha destacado del estilo de la duquesa durante este viaje ha sido su versatilidad a la hora de elegir el ‘look’ más adecuado a cada situación. Guillermo, por su parte, optó por un clásico esmoquin negro y pajarita.
Catherine y Guillermo fueron recibidos como auténticas estrellas del celuloide y quisieron saludar a los cientos de curiosos y admiradores que se agolpaban a las puertas del teatro para ver a la pareja de moda. Acto seguido, desfilaron sobre la alfombra roja siguiendo los pasos de personalidades tan conocidas como Jennifer López, Tom Hanks y su mujer Rita Wilson, Nicole Kidman, Jennifer Garner, Blake Lively o Anna Kournikova.
Tras una entrada triunfal, la pareja estuvo hablando animadamente con el resto de invitados, posiblemente, compartiendo impresiones sobre sus últimos días en diferentes ciudades de Canadá y Estados Unidos, dentro de su primer viaje oficial tras convertirse en los duques de Cambridge el pasado mes de abril. Durante la cena, los anfitriones compartieron mesa con Nicole Kidman y Barbra Streisand, así como con ejecutivos de estudios de Hollywood y personal diplomático.
Esta gala puso fin a la segunda jornada de su estancia oficial de tres días en California, tras la participación del príncipe Guillermo en un partido benéfico de polo en el que su equipo consiguió la victoria. Según la prensa local, se calcula que con los dos actos que tuvieron lugar el sábado, se consiguió recaudar más de 4 millones de euros. Entre las actividades programadas para hoy domingo, los duques tienen previsto visitar un centro educativo para menores desfavorecidos en Los Ángeles y una feria de reinserción laboral para soldados. Está previsto que la pareja regrese a Inglaterra esta noche, diez días después de iniciar su gira norteamericana el pasado 30 de junio en Ottawa, Canadá.