Los duques de Cambridge se mudan a Kensington, el palacio londinense donde vivió de pequeño el príncipe Guillermo
Según ha informado un portavoz de Saint James se trata de una residencia temporal y "ya se están buscando soluciones a largo plazo"
El palacio de Kensington está ligado a la vida del príncipe Guillermo desde su infancia. Allí creció junto a sus padres, Carlos de Inglaterra y la fallecida princesa Diana, y su hermano, el príncipe Harry. Ahora, convertido en el duque de Cambrige, regresa junto a su esposa, Catherine, según ha confirmado un portavoz del Palacio de Saint James: “Su residencia principal seguirá siendo su casa en Anglesey, en el País de Gales, su oficina se instalará en el Palacio de Saint James y su casa en Londres estará en Kensington”.
Se espera que los duques de Cambridge se muden al palacio a finales de este mes o en julio. No obstante, se trata de una residencia temporal, y se están "buscando soluciones a largo plazo", señaló el portavoz.
Al parecer, la reina Isabel II les ofreció un apartamento en Buckingham pero los duques de Cambridge han preferido la intimidad de Kensington, el palacio donde creció y disfrutó de una infancia muy feliz el príncipe Guillermo y al que regresó en 1996 cuando su madre se divorció de Carlos de Inglaterra. Desde ese año y hasta su trágica muerte el 31 de agosto de 1997, Kensington se convirtió en la residencia oficial de la princesa Diana. Sin embargo, los recién casados no ocuparán las mismas habitaciones, sino que residirán en una propiedad diferente dentro de la finca.
El palacio está lleno de recuerdos para el príncipe Guillermo. Sus padres se instalaron en su día en él por la privacidad que ofrecía. Vivieron en los apartamentos 8 y 9 y Guillermo y Harry tenían dos habitaciones- situadas justo encima de las de sus padres- y su propia sala de estar, que Guillermo llenó de soldados. Kensington era todo un paraíso para los niños, con sus largos pasillos, sus impresionantes jardines y terraza.
A los cuatro años, el heredero del heredero comenzó a ir a la escuela Wetherby en Notting Hill y la princesa Diana solía llevarle a clase siempre que su agenda oficial se lo permitía. Además, era habitual verles pasear por los alrededores de Kensington y acudír a las tiendas y restaurantes de la zona.
El palacio de Kensington es una mansión de ladrillo rodeada de bellos jardines que fue construida en el siglo XVII. Su historia siempre ha estado vinculada a la Familia Real británica. Allí nació la reina Victoria, y ahora viven los primos de la reina Isabel II: los duques de Gloucester y los príncipes de Kent.
Actualmente, la residencia está siendo sometida a una exhaustiva rehabilitación. Por ejemplo, el apartamento 1, la antigua vivienda de la princesa Margarita, hermana de la reina Isabel II, se convertirá en una sala de exposiciones sobre su vida.
Este palacio es uno de los mayores reclamos turísticos de Inglaterra. Por eso, está dividido en dos zonas completamente diferenciadas: las de uso exclusivamente privado y público. Los visitantes pueden ver las exposiciones, pasear por los jardines y degustar un magnífico té en su restaurante pero no pueden acceder a las residencias privadas de los miembros de la realeza.
Las exposiciones que mayor número de turistas atraen son las referentes a la princesa Diana. En estos momentos, y debido a las obras de reconstrucción del palacio, se ha cerrado la muestra “Diana, la moda y el estilo”, para proteger los vestidos de cualquier daño, pero los visitantes pueden disfrutar de la exposición multisensorial “El palacio encantado” en la que se revelan las historias de amor y odio, de sorpresa y tristeza, de secretos y celos de los antiguos residentes de Kensington.
También pueden visitar la Galería del Rey, diseñada por William Kent; la Escalera del Rey, con impresionantes retratos de tamaño natural de la corte del rey Jorge I; la habitación de la reina de Inglaterra María de Módena (1658-1718) y la habitación de la reina Victoria (1819-1901) en la que una noche se acostó como princesa y se levantó como Reina.