Las claves del cambio de 'look' de la princesa Beatriz
¿Qué tiene la princesa Beatriz que en sus últimas apariciones acapara todos los flashes? La mayor de las hijas de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés ha cambiado bastante en los últimos meses, y no sólo su figura, sino también su estilo.
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De una imagen a otra han pasado dos años, y es que desde que comenzó a entrenar para participar en la maratón de Londres, en abril de 2010, Beatriz se aficionó a este deporte y comenzó a bajar peso y a conseguir un cuerpo atlético y estilizado y quitarse esos kilos de más con los que no estaba contenta. Tanto le gustó participar en maratones que repitió la experiencia meses después y volvió a completar los 42 kilómetros consiguiendo un buen tiempo para ser una principiante y participando con un grupo, en el que iban todos atados con cuerdas por un fin benéfico. Si comparamos alguna imagen de ella de hace unos años, el cambio es más que visible.
Y después de un gran cambio en su figura, tocaba elegir nuevas prendas de ropa acordes a su nueva talla y de paso, aprovechó para modernizar su fondo de armario. De un estilo clásico e ir vestida prácticamente igual que su hermana, la nieta de la reina Isabel II ha pasado a lucir modelos más a la última y en muchas ocasiones, apostar por célebres diseñadores, como en la fiesta previa al enlace de Guillermo de Inglaterra y Catherine Middleton, donde lució un vestido de corte sirena en blanco y lentejuelas plateadas de Vivienne Westwood. También ha apostado por el pelo liso y suelto, que combina a la perfección con un maquillaje en tonos nude, con los que consigue un aspecto muy natural y a la vez juvenil.
Al día siguiente, en la boda de su primo el príncipe Guillermo, su look fue uno de los más comentados, tanto por su atrevido tocado, del Philip Treacy, como su elegante vestido de Valentino Alta Costura. Y lo de su tocado no quedó allí, porque desde que los duques de Cambridge pasaron por el altar se ha seguido hablando de él, ya que lo subastó para conseguir fondos para Unicef y finalmente ha encontrado un nuevo dueño por la escalofriante cifra de 92.000 euros.
Y si en la boda real nos quedamos boquiabiertos con su cambio, ha sido en su última aparición pública, en el Chelsea Flower Show de Londres, donde ha quedado más patente su cambio. Con un ajustado vestido color vino, unos altísimos tacones color maquillaje y un bolso de mano a juego, puso la nota de elegancia al evento. Ella es el ejemplo de que con una dieta sana y equilibrada, sin prisas, con ejercicio, mucha constancia y eligiendo ropa que vaya con su personalidad y que se adapte a su cuerpo, se puede estar así de bien. Continuaremos siguiéndole la pista.