Pasada la vorágine, en mayor o menor medida, de la boda real entre el príncipe Guillermo y Catherine Middleton, Chelsy Davy, la gran amiga del príncipe Harry, se ha dejado ver de compras por las calles de Londres en compañía de una amiga.
Chelsy, quien debido a la relación que mantuvo con el príncipe Harry, se convirtió en una de las invitadas más esperadas del enlace, aprovechó el soleado día londinense de ayer para adquirir algunos ‘modelitos’ de cara al verano. Con un primaveral vestido y unas cómodas zapatillas blancas, ideales para ‘patearse’ la ciudad, la sudafricana se mostró muy sonriente en todo momento, a pesar de ser consciente de la admiración que levantaba en cada uno de los establecimientos que visitaba.
Davy, quien el pasado forjó una bonita amistad con la duquesa de Cambrigde, fue vista probándose un par de zapatos iguales a los que Catherine lució en día anterior y posterior a su boda, un modelo de la firma L.K Bennet de charol negro con una gran plataforma, que pueden ser adquiridos por 144 euros. Sin embargo, los que se probó Chelsy eran algo más asequibles pues la cuña del zapato en vez de ser de corcho como los de Catherine, era de esparto, lo que rebajaba su precio a 66 euros.
Con todo eso, Chelsy no parecía muy convencida, y abandonó el local con las mismas zapatillas blancas con las que comenzó su jornada de compras, eso sí, desconocemos si horas más tarde, y tras haberlo meditado, la joven volvería a por ellos.
Chelsy regresó a Londres el pasado mes de septiembre, procedente de Zimbabwe, su país natal, para trabajar en el bufete de abogados Allen & Overy, y según se rumorea para estar más cerca del príncipe Harry, un dato que por el momento no se ha confirmado.
Catherine por su parte se prepara para su nueva vida como esposa del príncipe Guillermo, quien ayer se incorporaba de nuevo a su trabajo como teniente de vuelo en la unidad de búsqueda y rescate de la RAF en la base aérea de Anglesey.