El príncipe Guillermo se ha sumado a la lista de príncipes y princesas que ya han hecho las maletas para disfrutar de sus vacaciones estivales y ha viajado con un pequeño grupo de amigos a una exótica isla del Océano Indico.
El primogénito de los Príncipes de Gales ha vuelto a Rodrigues -400 millas al este de Mauricio-, donde pasó parte de su año sabático, para huir de los continuos rumores sobre su vida sentimental y mejorar su buceo. "Estuvo allí cerca de una semana y pasó la mayor parte del tiempo buceando con escafandra. Se está convirtiendo en un buzo muy bueno", comentó un compañero.
Un gran buzo
El Príncipe, que fue retratado en bañador, montando en moto, así como poniéndose el equipo de submarinismo, volvió a reunirse en Rodrigues con los amigos que hizo en 2001 durante su visita. Entonces, el [príncipe Guillermo] trabajaba para la Sociedad Real Geográfica en un proyecto de conservación, pero encontró tiempo también para entablar amistad con los nativos a los que enseñó cómo jugar al rugby y al waterpolo. En esta ocasión, en cambio, el Príncipe disfrutó de unos días de descanso. "Se hospedaba en una casa pequeña, donde se levantaba temprano y se acostaba, igualmente, pronto. Parecía muy feliz. Se relacionaba con facilidad con los aldeanos del lugar", dijo un testigo.
No había señal de Kate Middleton, amiga y compañera de estudios del Príncipe en la Universidad de St. Andrews, tampoco de Paulina Trotz, la joven argentina con la que la prensa británica le ha relacionado recientemente, lo que, sin lugar a dudas, se hubiera convertido en la fotografía del verano. Los rotativos del país no pierden las esperanzas de conseguir la codiciada instantánea y con tal motivo se afanan en seguir los pasos del Príncipe durantes sus vacaciones estivales.
Aparte de su amada África, adonde va siempre que puede, el príncipe Guillermo se inclina, sobre todo, por determinadas regiones de su reino para hacer una escapada y disfrutar de unos días de ocio.