Ámsterdam congregó toda una constelación de astros del cine, pero Guillermo y Máxima de Holanda fueron las estrellas que más brillaron. Se integraron a las mil maravillas en el star-system y eclipsaron a todas las demás que anoche desfilaban junto a ellos por la alfombra roja del teatro RAI para presentar la película Nova Zembla. La primera cinta holandesa en 3D, dirigida por Reinout Oerlemans y protagonizada por conocidos rostros del celuloide holandés como Robert de Hoog, Derek de Lint o la top model Doutzen Kroes, que narra el legendario viaje en 1596 del aventurero holandés Willem Barentsz a lo largo de la costa de Nueva Zembla, actual Rusia, en su intento de encontrar una ruta que le llevara al Lejano Oriente.
Los príncipes Guillermo y Máxima han querido mostrar con su presencia en esta premiere su rotundo apoyo al cine holandés, en general, y a esta película, en particular. Y, para ello, pusieron en su puesta en escena toda la carne en el asador. La princesa, perfectamente maquillada y peinada con un recogido bajo, ejerció de diva del cine derrochando glamour con un sofisticado vestido de noche de color negro de un solo hombro y sus elegantes complementos de joyería. Aunque ella fue la indiscutible protagonista, como nos tiene acostumbrados en todas sus apariciones públicas, contó también con un partenaire a la altura, también con sonrisa de película.
La espectacular presentación del filme, que ha contado, aparte de los príncipes Guillermo y Máxima, con otros miembros de la familia Orange, como los príncipes Floris y Aimee y los príncipes Maurits y Marilene, y con la asistencia de un nutrido grupo de celebridades, augura grandes éxitos. El primero: la presencia real en su estreno.