Los príncipes de Orange y la reina Beatriz, tres turistas en las espectaculares ruinas mexicanas de Teotihuacán
Aunque su viaje oficial al país azteca iba a durar tres días, han prolongado uno más su estancia para poder disfrutar del arte precolombino
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La reina Beatriz de Holanda y los Príncipes de Orange dieron por finalizado ayer el viaje de estado a México. Su tercera jornada tuvo al clima como protagonista principal. El programa comenzó en la ciudad de Guanajuato donde la comitiva real visitó el centro Las Yerbas, en el que se forma a investigadores en el campo de la agricultura y la gestión del agua. El príncipe Guillermo se mostró muy interesado en las innovadoras técnicas agrícolas destinadas a terrenos secos.
Poco después, la soberana y los Herederos visitaron la casa natal de Diego Rivera donde pudieron admirar múltiples obras del afamado pintor mexicano. El viaje de estado se cerró con un paseo por las calles del centro de Guanajuato, de típico estilo colonial, donde los reales visitantes fueron agasajados por una tuna que interpretó en su honor conocidas canciones autóctonas. Los Orange no dejaron de recibir el afecto de los habitantes de Guanajuato e incluso la Reina recibió algún regalo de algunos de los espectadores.
Al día siguiente y como colofón de la visita disfrutaron de las espectaculares ruinas de Teotihuacán, a unos cincuenta kilómetros al norte de la capital azteca. Este enorme complejo arquitectónico contiene alguna de las más grandes pirámides del periodo precolombino, además de varios palacios y templos.
Siguiendo las recomendaciones que se hacen a todos los turistas, los ilustres visitantes eligieron para la ocasión ropa y calzado cómodos ya que para poder disfrutar de los encantos de esta ciudad es necesario caminar por un terreno irregular y a 2.300 metros de altitud. Los Orange comenzaron la visita recorriendo la llamada Calzada de los muertos, el eje neurálgico de la urbe y flanqueado por los edificios más importantes del complejo, como el palacio de Quetzalpapalotl o el palacio de los Jaguares, auténticas joyas arquitectónicas sin parangón. La Reina y los Herederos eligieron posar delante de la Pirámide de la Luna para la tradicional foto de familia.
Pese a que no estaba previsto, los Príncipes decidieron ascender la Pirámide del Sol, en este caso sin la presencia de la Reina que ya había estado en su cima en la visita oficial de 1964. Los príncipes Guillermo y Máxima demostraron estar en plena forma al ascender los 248 escalones y 75 metros que componen este imponente edificio en un tiempo récord.
La visita a Teotihuacán terminó con un breve encuentro con la prensa en el que la Reina dijo sentirse entusiasmada con el viaje. Por su parte la princesa Máxima dijo haber estado en México en varias ocasiones pero sólo en viajes de trabajo, durante el periodo en el que trabajó para un banco de Nueva York. Además la soberana afirmó haberse vacunado contra la gripe A. La Princesa comentó que sus hijas serán vacunadas con toda probabilidad el próximo lunes.
En cuanto a temas más políticos, como el debate sobre los costes de la Casa Real, la Reina dijo sentirse satisfecha con la transparencia de las cuentas y afirmó que la Familia Real siempre es "muy prudente" en materia de gastos. Por su parte el príncipe Guillermo reconoció haber "pasado noches en blanco" tras las críticas recibidas en los últimos meses por su intención de adquirir una casa de vacaciones en Mozambique.