Recientemente la princesa Máxima de Holanda ha concedido una entrevista a un canal de televisión holandés. En ella pudimos ver el lado más humano de su futura reina. Habló de su papel en la Corona así como de sus inquietudes personales. La esposa del heredero, embarazada de su segundo hijo, habla de la inmigración y de la integración en su nuevo país, un problema por el que lucha especialemte pues, como ella misma dice: "Yo también soy extranjera". Reproducimos a continuación parte de esta cálida e interesante entrevista.
"Los primeros acercamientos al pueblo holandés" -¿Qué sabía de Holanda en un principio? Lo cierto es que mas bien poco. Algo de arte, sobre todo del siglo XVII, algo sobre cuestiones económicas- me suena haber estudiado algo del desarrollo de Rotterdam- y en cuanto a historia, algo muy general, me acuerdo de que en Secundaria vi algo de la gestión del agua en los Países Bajos.
-Háblenos de la primera vez que vino a Holanda. El primer sitio que conocí de Holanda fue Schiphol, el aeropuerto de Amsterdam, pero siempre iba de paso, nunca me quedaba. La primera vez que estuve de visita fue ya con Willem Alexander, en agosto de 1999. Las dos primeras visitas estuve de incógnito, nadie me conocía y podía moverme con libertad. Ya había empezado a estudiar neerladés en Nueva York y podía decir un par de palabras, así que aproveché para ir a museos, pasear, comer lo típico. Recuerdo que mi primera impresión fue muy agradable, hacía un tiempo estupendo, había muchas flores, colores... recuerdo que vi a una mujer en bici con su hijo y la compra y pensé que las mujeres holandesas eran muy fuertes, yo no sé si podría verme así en una bicicleta...
-Cómo es eso de que estudiaba ya neerladés, ¿quizás se veía ya como futura princesa? No, pero si las cosas llegaban hasta el punto de tener que planteármelo quería tener una cierta base, y saber algo del país podría ayudarme a tomar esa decisión. Estudiaba el idioma como una forma de acercarme a la cultura de Holanda.
-Sin embargo, todo ha cambiado con el tiempo, ahora la podemos ver en visitas a todo tipo de instituciones acompañada siempre de su "Hofdame" o "dama de compañía". Efectivamente, ahora Pien Zaaijer es la persona con la que siempre analizo la agenda de la semana en el Palacio de Noordeinde y que va conmigo a todas partes.