El príncipe Friso, que ya había aprendido a vivir con su destino de relevo del príncipe heredero Guillermo , confesó: "Es duro aceptar que ya no estás ahí. Siempre ha estado preparado para subir al trono, pero no bastaba con sentarse en el banquillo a esperar. Así que se hice una carrera. Por eso ha sido especialmente duro para mí tener que renunciar a mis derechos a la Corona". No obstante, la pareja desmiente que haya una sombra sobre su matrimonio por el hecho de que el príncipe Friso haya tenido que renunciar a sus derechos a la sucesión de la corona. "La verdadera zozobra es que faltan tres padres (dos de Mabel y el de Friso)", señala Mabel.
Los periodistas preguntaron también al príncipe Friso por los rumores que habían circulado en el país sobre su homosexualidad y las razones que llevaron al RVD (gabinete de comunicación de la Casa Real holandesa) a desmentir tales comentarios. "Fueron momentos difíciles para nosotros. Nos decidimos a realizar el desmentido porque ya hasta la prensa seria estaba haciéndose eco de los rumores sobre mi supuesta homosexualidad. Se estaba fomentando comentarios y debates del tipo a ¿Puede un homosexual ser el próximo Rey de Holanda? y cosas así. Polémica que no dejaba de ser una solemne tontería". Cuando preguntaron Mabel Wisse al respecto, ésta, que ya había tenido relaciones con el Príncipe durante dos años, contestó irónicamente: "Para mi estaba bastante claro que no era verdad".
Amor, amor
A lo largo de la entrevista, los prometidos dieron, de hecho, un sinfín de razones por las que están enamorados. El príncipe Friso dice de Mabel que es cariñosa, que no conoce a nadie que haya tenido tanta influencia en su vida como ella, y que en lo profesional se complementan bien, porque mientras ella está más comprometida con los problemas sociales, él se centra en el campo de la economía.: "No conozco a nadie que haya tenido un impacto tan grande en mi vida como Mabel. Cada día con Mabel es una nueva sorpresa. Nunca hemos pasado un día en el que nos hayamos aburrido".
Mabel dice del príncipe Friso que es excepcionalmente agudo, con un sentido del humor bárbaro y que les gusta estar siempre juntos -viajar, hacer deporte (tenis, submarinismo...), salir etc.-y que siempre le sorprende. Recordó a colación cómo el Príncipe le pidió que se casara con él. "Estábamos en México. Friso apareció inesperadamente en su puerta, vestido con un traje mexicano blanco...Pensé que era una broma. Hasta que no sacó el champagne y las rosas no me imaginé que se trataba de algo más que de una broma y que me pediría matrimonio". Mabel concluye: "Friso vive su vida de una forma íntegra. El hecho de que sea Príncipe es incidental. Yo me he enamorado de su persona".