Los Reyes reciben un Goya especial por su afición al cine español

Antes de ofrecer un almuerzo al presidente de Senegal en el Palacio Real, don Felipe y doña Letizia recibieron en la Zarzuela a la Junta Directiva de la Academia de Cine, que les invitó a presidir la gala del próximo 7 de febrero

por hola.com

Cuando están a punto de cumplirse sus primeros seis meses de reinado, el próximo viernes día 19, y antes de vivir sus primeras Navidades como soberanos, don Felipe y doña Letizia han recibido un premio por su conocida afición al cine español. Desde que eran Príncipes de Asturias, han sido frecuentes sus salidas privadas a las salas de cine madrileñas para disfrutar en pantalla grande de las últimas películas realizadas en nuestro país, y por ese motivo la Junta Directiva de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España ha querido hacerles entrega de un Goya especial en reconocimiento a su afición al cine 'made in Spain'.
 

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El acto de entrega tuvo lugar este lunes en la Zarzuela. La Junta Directiva de la Academia, encabezada por el presidente, Enrique González Macho, puso de manifiestoen tono distendido al obsequiar con esta estatuilla a los Reyes que este Goya "tiene mucho valor" por su carácter extraordinario, mientras que su director general, el director de fotografía Porfirio Enríquez, destacó que se trata del primer Goya que entrega la actual Junta Directiva, que fue renovada el pasado mes de mayo.


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El Rey sostuvo el recién recogido Goya al posar junto a doña Letizia y sus invitados ante los medios gráficos en el Salón de Audiencias, donde los soberanos conversaron con los representantes de la Academia, entre los que también se encontraban la vicepresidenta segunda, la directora y guionista Judith Colell, y diecisiete vocales, entre ellos el director Emilio Martínez Lázaro, cuya comedia Ocho apellidos vascos se ha convertido en la película española más vista de la historia. Pedro Eugenio Delgado, Patricia Ferreira, Yousaf Bokhari, Sol Carnicero, Tatiana Hernández, Yvonne Blake, Manolo Velasco, Juan Luis Iborra, Fernando Chinarro, Antonio Panizza, Guillermo S. Maldonado, Juan Carlos Cuello, Zacarías Martínez de la Riva, Ana Amigo, David Rodríguez Montero y Ricardo Steinberg completaban la lista de vocales de la Academia que acudieron a la Zarzuela.


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La Junta Directiva ha invitado a los Reyes a presidir la próxima gala de premios, que se celebrará el 7 de febrero en el Hotel Auditorium de Madrid. No sería la primera vez que don Felipe preside la entrega de galardones del cine español, pues ya lo hizo en la edición del año 2000 celebrada en Barcelona un 30 de enero, coincidiendo con su cumpleaños, circunstancia que recordó desde el escenario Pedro Almodóvar antes de corear un improvisado Cumpleaños feliz que el entonces Príncipe de Asturias agradeció poniéndose en pie.

Tampoco es la primera vez que la Familia Real recibe un Goya. El rey Juan Carlos fue obsequiado con uno especial en 1987, con ocasión de la primera edición de estos premios, junto a doña Sofía, y recibió otro en la Zarzuela en 2009 de manos del entonces presidente de la Academia, el director Álex de la Iglesia, durante una audiencia que concedieron el 23 de noviembre de aquel año a los integrantes de la Junta Directiva de esta institución.


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El mismo lunes, después de recibir en audiencia a la Academia de Cine y de nuevo acompañado por la Reina, don Felipe ofreció un almuerzo en el Palacio Real al presidente de Senegal, Macky Sall, con motivo de la visita oficial a España del mandatario africano. Al almuerzo también asistieron los responsables de las principales instituciones del Estado, encabezadas por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
 

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Ante los 80 invitados congregados, entre autoridades, empresarios y representantes de ONG's vinculadas a Senegal, Felipe VI puso el acento en los vínculos políticos, económicos y de cooperación con este "país amigo y socio estratégico" de España en el África Occidental. El Rey subrayó la apuesta por la "cultura democrática y el modelo social de convivencia pacífica" que han hecho de su país un "polo de estabilidad" en África, y ha valorado en especial su "firme compromiso" en la lucha contra la amenaza terrorista en el Sahel.