Cuando somos pequeños nos encanta leer las historias de príncipes y princesas que viven un verdadero cuento de hadas, solo que en su caso la princesa Leonor es la protagonista de su propio cuento. Cumple mañana nueve años más consciente de su papel en la línea de sucesión y de que es una niña diferente a sus amigas porque un día ocupará su lugar en el Trono.
Desde la sucesión, en apenas cuatro meses, la princesa Leonor ha pasado de participar exclusivamente en los posados vacacionales de turno por Navidad, Semana Santa y verano a comenzar a hacer agenda acto a acto junto a sus padres con más de cinco apariciones oficiales en los últimos tiempos. Antes del anuncio del relevo en el trono, asistió el 2 de mayo con los entonces Príncipes y la infanta Sofía al 25º aniversario de la promoción de la Academia General del Aire de San Javier. Después del comunicado de la renuncia de don Juan Carlos a la Corona, no faltó por supuesto ni el 18 de junio en la ceremonia de abdicación de su abuelo y ni al día siguiente, el 19 de junio, en la proclamación de su padre como Rey de España. Siguió durante el verano, la misma tendencia de creciente protagonismo con no una sino dos sesiones fotográficas y su primer saludo a la prensa como Princesa de Asturias. Por último, debutó en el desfile militar del 12 de octubre junto a sus padres y su hermana.
A su edad difícilmente podrá entender en toda su magnitud lo que significa que será la cuarta Reina como titular de la Corona o la XXXVI Princesa de Asturias, pero no cabe duda de que sus padres ya han empezado a prepararla para el destino excepcional al que ha sido llamada. Quieren que, al igual que su hermana, la infanta Sofía, tenga una infancia despreocupada, crezca feliz y juegue como el resto de los niños de su edad. De hecho, por el momento no hacen ninguna diferenciación en su formación, que es exactamente igual para las dos. Aunque tampoco olvidan el papel que su hija desempeñará en la historia de nuestro país y que sobre ella recaerá una gran responsabilidad.
Leonor tiene mucho encanto, una sonrisa cautivadora y, aunque tiene unos intensos ojos azules, herencia de su padre, cada vez se parece más a su madre en el físico, en los gestos y en el estilo a la hora de vestir. Los que la conocen aseguran que es "muy princesa", con clase y muy lista. Es una niña extrovertida, sin miedo escénico ni vergüenza, una alumna aplicada, con mucha memoria y que se relaciona muy bien con todos sus compañeros.
Responsabilidad, respeto, cooperación... son algunos de los valores que defiende el colegio Santa María de los Rosales, donde la princesa Leonor cursa cuarto de Primaria. En este centro madrileño también recibe clases de inglés, incluso algunas asignaturas se imparten en este idioma para que poco a poco consiga hablarlo con la misma fluidez que el castellano. De hecho, en un futuro no muy lejano viajará al extranjero para perfeccionarlo. Mientras tanto, doña Letizia intenta siempre que puede leerles cuentos en la lengua franca y trata de que sus hijas vean las películas en versión original. Su abuela, la reina Sofía, también les habla habitualmente en este idioma, al igual que hizo con sus tres hijos.
Don Felipe y doña Letizia han considerado que es importante que sus hijas sepan hablar chino mandarín, y, aunque se trata de un idioma extremadamente difícil de aprender de mayor, cuando son pequeños les resulta mucho más fácil. Por ello, Leonor y Sofía van a clases dos veces por semana, y a estas alturas ya son capaces de cantar canciones sencillas, nombrar las partes del cuerpo y pronunciar las letras. Además de los idiomas, una parte fundamental de su educación para sus padres, hay otras actividades extraescolares que Leonor ya empieza a dominar. Asiste a clases de ballet y, dependiendo de la época del año, practica tenis, esquí y natación.
La nieta de los reyes Juan Carlos y Sofía, que como su padre recibirá formación militar, prepara ya la catequesis de la Primera Comunión en el colegio con el párroco de Aravaca. Los Reyes tendrán que determinar si la recibirá, al igual que el resto de sus compañeros, en la parroquia de Aravaca o hacen una celebración aparte. En el caso en el que finalmente la haga con los niños de su clase, no se vestirá con el típico vestidito blanco de Primera Comunión, ya que es norma del colegio que lo hagan con el uniforme.
Además de Princesa de Asturias...
Como Heredera de la Corona, desde la proclamación de su padre como Rey además del título de Princesa de Asturias recibe los títulos de Princesa de Girona y Princesa de Viana, correspondientes a los primogénitos de los Reinos de Castilla, Aragón y Navarra, cuya unión formó en el siglo XVI la Monarquía española. Ostenta, asimismo, los títulos de Duquesa de Montblanc, Condesa de Cervera y Señora de Balaguer.
Desde que nació el 31 de octubre de 2005, hemos sido testigos de los momentos más entrañables de la séptima nieta de los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía: su bautizo como Leonor de Todos los Santos en el Palacio de la Zarzuela el 14 de enero de 2006; su presentación ante la Virgen de Atocha, siguiendo la tradición de la Familia Real; sus primeras vacaciones en Palma de Mallorca, su primer posado oficial, su primer día de guardería, su complicidad con su hermana, su primer acto militar, sus cariñosos gestos con sus abuelos, su simpatía al posar ante los fotógrafos… Sin duda, inolvidables momentos de esta pequeña princesa que poco a poco se va haciendo mayor. De un Princesa que, aunque está todavía en la edad de clamar “por mí y por todos mis compañeros”, se acerca al día en el que alzará la voz para decir “por mí y por todos los españoles”.